La sala tercera del Tribunal Supremo comunicó ayer la admisión a trámite del recurso contencioso presentado por el Ayuntamiento de Cartagena contra el Real Decreto aprobado en enero por el consejo de ministros por el que se aprueba la revisión del plan hidrológico del Tajo que supone un recorte en las transferencia de agua hacia el levante, según ha informado esta mañana la alcaldesa, Noelia Arroyo.
Arroyo ha informado sobre el recurso, que fue aprobado por el Pleno, en la apertura de unas jornadas sobre el proyecto Aquifer, sobre gestión de aguas subterráneas, organizada por la Comunidad de Regantes del Campo de Cartagena. El acto se ha celebrado este martes, 18 de abril, con la asistencia de la alcaldesa, Noelia Arroyo, el presidente de la Comunidad de Regantes Campo de Cartagena, Manuel Martínez, el Director General del Agua CARM, José Sandoval y el Director del Proyecto AQUIFER, José Luis García-Arostegui.
El recurso ha sido presentado para defender los derechos de los regantes y los de los ciudadanos y las empresas cuyo abastecimiento también depende de las aguas del trasvase. “Un tercio del agua que bebemos procede del trasvase Tajo-Segura a través de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla. Menos trasvase supondrá más agua desalada y por tanto precios más altos. Por eso tenemos que exigir que los cálculos que han justificado el recorte se ajusten a la realidad y se elaboren con criterios científicos”, ha dicho la alcaldesa.
La alcaldesa ha recordado que la falta de agua “es una realidad con la que convivimos desde siempre en esta zona de España y por eso hemos sido pioneros en la gestión eficiente del agua tanto para el riego como para el consumo humano. Nuestros agricultores tienen riegos tecnificados y la red de suministro de Cartagena tiene una eficiencia que el 90%. Eso no es así en todos los lugares. Este fin de semana hemos sabido que en Cataluña se pierde la cuarta parte del agua por fugas en la red“.
La alcaldesa ha dicho que la región y el Campo de Cartagena deben seguir estudiando métodos sostenibles para realizar el mejor aprovechamiento de los recursos hídricos. “Tenemos dos problemas paralelos, uno es la escasez de agua y otro es el exceso de agua del freático que entra al Mar Menor con nitratos. Si fuera posible corregir la falta de agua para el riego con el exceso de agua que se filtra, sería una gran oportunidad tanto para nuestra agricultura como para el Mar Menor, pero es imprescindible tener todas las garantías sobre la viabilidad ambiental de cualquier solución”.
Presentación del proyecto AQUIFER
El proyecto AQUIFER que ha presentado la Comunidad de Regantes Campo de Cartagena tiene como objetivo innovar en la preservación, monitorización y gestión integrada de los acuíferos de la comarca con el fin de ayudar en la toma de decisiones de la gestión de los recursos hídricos subterráneos. Para dar a conocer las conclusiones del proyecto se ha celebrado una conferencia en la que se han expuesto dichas conclusiones.
“Creo que es muy importante encontrar oportunidades basadas en la ciencia, con todas las garantías y toda la viabilidad para resolver los dos problemas que tenemos en el Campo de Cartagena. Por un lado, la escasez hídrica, y por otro lado, el incremento del freático que entra al Mar Menor con nitratos”, ha afirmado la alcaldesa, Noelia Arroyo.
Precisamente ese es uno de los objetivos que persigue el proyecto AQUIFER, un estudio europeo en el que también han participado países como Francia y Portugal, o Barcelona, en el plano nacional, que permitirá “crear sinergias con otras localidades que sufren problemas hídricos similares”, según ha declarado Manuel Martínez.
El proyecto presentado simula un siglo de explotación de los acuíferos, desde 1920 hasta la actualidad, reproduciendo el efecto que ha tenido la sobreexplotación y la falta de agua antes del transvase. La principal conclusión que se ha obtenido es que las dinámicas del acuífero son muy lentas, aunque se considera que “en los últimos 5 o 6 años, gracias a la reducción del bombeo y al aumento de precipitaciones que hemos vividos, hemos conseguido llegar a niveles casi máximos históricos”, ha declarado José Sandoval.
La agricultura del Campo de Cartagena es considerada como una de las más avanzadas en cuanto a producción, sin embargo, no se debe olvidar que “nos encontramos en una zona de escasez de recursos”, como ha declarado Martínez. Esto implica la necesidad de innovar a la hora de aprovechar estos recursos, o encortar nuevas fuentes, como desalar el agua del mar, lo que supone una gran inversión económica y no es suficiente; o contar con el trasvase Tajo-Segura, considerado “la principal arteria que aporta agua al sureste español”.
En cuanto al uso de las aguas subterráneas es necesario “aprender a usar de forma sostenible y controlada”, ha indicado el presidente de la Comunidad de Regante. Ya que, estas aguas se han declarado como no aptas para el riego por la FAO, por lo que precisan de ser mezcladas o tratadas.
Como ha indicado Sandoval, “el problema del almacenamiento de agua subterránea es la masa contaminante que mueve. Descontaminar el acuífero es imposible, pero si se puede reducir cuanto se descarga. Sacando más agua se consigue que se vierta menos contaminación al Mar Menor”.
En este estudio, también se ha encontrado que existe una barrera hidrogeólogica entre el Campo de Cartagena y el de Fuente Álamo, lo que convierte a esta segunda zona en una cuenca independiente. Esto significa que los bombeos o contaminaciones que surgen en Fuente Álamo no afectan a la zona de Cartagena o del Mar Menor.
El efecto de la sequía en el Campo de Cartagena
El impacto de la sequía en el Campo de Cartagena “no es alentador”, como ha indicado José Luis García-Arostegui. Actualmente “nos encontramos en situación de pre-alerta en el índice de escasez”. Por eso, es importante “estar preparados y tener los trámites administrativos y técnicos dispuestos para poner en medidas que permitan mantener las demandas económicas, sociales y ambientales de la cuenca del Segura, y de la región de murcia”.
Este preaviso viene ligado al uso de aguas subterráneas, “tener un buen conocimiento de esas aguas, que nos permitan tomar las decisiones adecuadas, y sobre todo, que nos permitan proteger las ya disponibles para en caso de emergencia”, ha concluido el Director del Proyecto AQUIFER.