El cartagenero Francisco Solano, quien falleció en las Islas Baleares víctima del régimen franquista, ya descansa en Cartagena. El cementerio San Antonio Abad ha acogido este sábado un emotivo acto en el que el Gobierno Balear ha hecho entrega al Ayuntamiento y a los familiares de Solano los restos del cartagenero.
La concejala de Transparencia y presidenta de la Comisión de Memoria Histórica del Ayuntamiento de Cartagena, Alejandra Gutiérrez, ha dado la bienvenida a los representantes del Govern de las Illes Balears desplazados a nuestro municipio con motivo de este acto: el secretario autonómico de Sectores Productivos y Memoria Democrática, Jesús Jurado, y el director general de Memoria Democrática, Marc Herrera. “Gracias por vuestras políticas en cumplimiento de la dignificación de las víctimas y la paz de las familias. Sois un ejemplo para nosotros y nos anima a continuar el camino comenzado”, ha agradecido la concejala.
"El principal objetivo de las políticas públicas de Memoria Democrática es el de identificar y devolver a las familias los restos de las víctimas recuperadas en las fosas de la represión franquista, las víctimas olvidadas. Francisco Solano cumplió prisión de manera injusta a manos de un régimen cruel, que lo mató de hambre y enfermedad en un penal que fue un infierno. Ahora llega un poco de reparación para ese dolor y esa injusticia, tanto para su familia como para su memoria", ha destacado Jurado.
También han asistido representantes de la Asociación de Memoria Histórica, Bernardo Sánchez, Pilar Sánchez y Francisco Muñoz, a quienes Gutiérrez ha reconocido “vuestra excelente labor y apoyo, y vuestra incesante lucha”.
Pero, ante todo, la presidenta de la Comisión de Memoria Histórica del Ayuntamiento de Cartagena ha querido agradecer a la familia de Francisco Solano su perseverancia. “La familia de Francisco no quiso que la historia acabase así. Siguieron luchando por la verdad y no desfallecieron en la esperanza de encontrar algún día a su querido familiar y conseguir, al fin, la paz: su paz y vuestra paz”, ha remarcado la concejala de Transparencia.
“Nos queda el consuelo de haber podido recuperar a nuestro abuelo”, ha señalado la familia, entre quienes se encontraban dos hijas de Solano, además de nietos y bisnietos.
Francisco Solano Vera es una de las 58 víctimas mortales documentadas que fallecieron en la colonia militar franquista de La Savina, en Formentera, entre 1940 y 1942, debido al desabastecimiento de alimentos y la ausencia de condiciones higiénico‑sanitarias en el Penal. Solano Vera la primera víctima exhumada en el cementerio de Sant Francesc que ha podido ser identificada.
Sus restos fueron recuperados en abril del año pasado, durante la primera fase de exhumaciones y excavaciones del cementerio de Formentera que impulsó la Vicepresidencia y Consellería de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática del Govern de las Illes Balears. Se localizaron en la sepultura 10 de la fila 6, en el patio 2 del cementerio de Sant Francesc Xavier. Según los datos y registros que maneja el gobierno balear, habría restos de otras 10 personas originarias de la Región de Murcia en el camposanto, aún por identificar.
El laboratorio BIOMICs de la Universidad del País Vasco (Vitoria-Gasteiz) llevó a cabo la identificación biológica, mediante la comparación genética de las muestras dadas por dos hijas de la víctima y las muestras óseas procedentes de la exhumación en el cementerio.
Francisco Solano Vera
Nacido el 13 de diciembre de 1902 en Cartagena y residente de Los Dolores, Francisco Solano Vera era panadero y estaba casado con Dolores Fernández, con la cual tenía seis hijos.
Cuando fue encarcelado, se le aplicó un consejo de guerra que lo condenó a 20 años de prisión. Las acusaciones para ello se basaron en el rumor público y nunca hubo pruebas. Murió el 7 de julio de 1942 en el Penal de Formentera a los 39 años, por caquexia y tuberculosis pulmonar.