Los más de 1.800 alumnos del centro se implicaron la recreación del Palacio de Herodes, la Anunciación, el mercado, escenas de pescadores, agricultores, panaderos, carpinteros y pastores, además del Nacimiento.
Tras cuatro años en los que la pandemia del COVID19 había impedido la organización del belén viviente en movimiento del colegio de San Vicente de Paúl de Cartagena, este martes por la tarde se batieron las cifras anteriores de visitantes, con 4.000, en una continua cola desde que se abrieron las puertas, a las 16:00 horas, hasta las 19:30 horas.
María Rosa Llamas, directora de Secundaria, Bachillerato y FP, ha destacado que "todos los alumnos de este centro educativo de la Fundación Alma Mater, más de 1.800, junto con el profesorado y varios grupos de padres y madres que colaboraron en talleres de preparación de una detallada escenografía, lograron recrear pasajes cotidianos de la ciudad de Belén en el momento histórico del nacimiento de Jesús".
A entrada al edificio incluía escenas del censo, el desierto, la vida cotidiana de las familias romanas y el Palacio de Herodes. Además, un coro de escolares vestidos de ángeles recibía al público en el patio interior. Junto a la Anunciación a María, alumnos de varios cursos ponían en escena a los pastores en torno al fuego, los pescadores en el lago, los agricultores en el huerto, las lavanderas en el río, así como los fruteros, artesanos, herreros, carpinteros y panaderos en el mercado. Como colofón del recorrido, en la capilla del colegio estaba el Nacimiento con los tres Reyes Magos, junto a la Luz de la Paz de Belén, para las familias que quisieran llevársela a casa.
El evento, que contó con la colaboración de la Agrupación de Soldados Romanos de la Cofradía California, la Confitería Davó, la Hermandad de Romeros de San Ginés de la Jara y Arteando Cartagena, incluyó la recogida de alimentos y juguetes para ayudar a las familias más necesitadas esta Navidad.