La Real e Ilustre Cofradía de Nuestro Padre Jesús Resucitado quiere mostrar su malestar y total rechazo frente a la situación acontecida entorno a las Cruces de Mayo del presente año, concretamente debido a la gestión de la Concejalía de Vía Pública en lo referente a esta festividad, pues ha quedado patente la impotencia a la que ha llevado la situación a las cofradías, concretamente a la del Resucitado. El conocimiento de las condiciones que iban a regir en la participación en las Cruces de Mayo así como la inscripción se han dado a conocer de forma tardía, lo que no nos ha permitido valorar la opción de poner nuestra tradicional Cruz ni gestionar la cesión de las barras.
Este malestar se ha incrementado al leer la noticia, publicada hoy en el periódico La Verdad, a través de la que hemos conocido que Hostecar pondrá una barra en la calle Palas, donde tradicionalmente hemos puesto nuestra Cruz y donde tenemos nuestra sede social. Es más, ayer mismo finalizó el plazo para comunicar la participación o no en esta fiesta, día en que así lo comunicamos; y nadie nos había consultado -por deferencia e historia- de si íbamos a poner o no Cruz, ni por parte de la Concejalía ni de Hostecar, donde, según se ha conocido hoy, pondrán ellos sus barras.
Valga este comunicado como muestra de nuestro malestar y rechazo a la gestión de las Cruces de Mayo de 2022, donde han logrado que todas las cofradías, que somos las que realmente recuperamos la tradición de festejar la Cruz de Mayo, hayamos sido los “grandes damnificados”.