Tras dos años de parón obligado por la situación sanitarias, los cartageneros han celebrado emocionados esta tarde el regreso de la Semana Santa a la ciudad portuaria y, por consiguiente, la vuelta de las procesiones a la calle.
El Nuevo Teatro Circo ha acogido este sábado, 5 de marzo, el pregón de la Semana Santa de Cartagena, a cargo del jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), el cartagenero Teodoro Esteban López Calderón, en una emotiva ceremonia que guiada por la alcaldesa Noelia Arroyo y presidida, como es tradicional desde su origen por la Nazarena Mayor 2022, Pilar Giménez Rubio.
El acto protocolario ha contado con la presencia de autoridades locales y regionales como; el presidente de la Comunidad Autónoma, Fernando López Miras, el Obispo de Cartagena, José Manuel Lorca Planes, el presidente de la Asamblea, Alberto Castillo, el delegado del Gobierno en la Región, José Vélez; el almirante de Acción Marítima, Juan Luis Sobrino, el consejero de Presidencia, Turismo, Cultura y Deportes, Marcos Ortuño; la rectora de la Universidad Politécnica, Beatriz Miguel y la presidenta de la Autoridad Portuaria de Cartagena, Yolanda Muñoz. entre otras. También, como es lógico, cuatro los hermanos mayores, marrajo, californio, resucitado y del Socorro, Francisco Pagán, Juan Carlos de la Cerra, Maríén García Boj y Manuel Martínez Guillén.
La alcaldesa, Noelia Arroyo, en su discurso de bienvenida ha querido agradecer al JEMAD que se haya convertido en pregonero de la Semana Santa 2022 a pesar de "la delicada situación que vivimos actualmente ha multiplicado su trabajo y sus obligaciones".
"Queremos personalizar en usted nuestro agradecimiento a los miembros de los ejércitos, muchos de ellos vecinos de Cartagena, desplazados en este momento a lugares lejanos o dispuestos a hacerlo para defender la democracia, la libertad y nuestra forma de vida", ha indicado Arroyo.
Así, la regidora ha destacado también su "doble nacionalidad cofrade, que es marraja y es del Resucitado, lo que la convierte en un buen ejemplo del cofrade cartagenero, que suele repartir amores, y es, por encima de todo, procesionista".
"Cada vez sentimos más cerca es la primera procesión de España, la que ve amanecer del Viernes de Dolores y que dos años de ausencia van a convertir en un acontecimiento de mayor emoción que nunca", se ha dirigido la alcaldesa a los asistentes.
Arroyo ha destacado que "la Semana Santa es mucho más que una sucesión de desfiles más o menos brillante; es un sentimiento, una tradición, es el recuerdo de otras procesiones y de otras Semanas Santas, incluso de las que no llegamos a vivir".
Por su parte, el presidente de la Junta de Cofradías, el hermano mayor californio Juan Carlos de la Cerra, ha sido encargado de presentar al Pregonero y la Nazarena, destacando en el caso del JEMAD su "genética california". Para de la Cerra, López Calderón es "un hombre íntegro y ejemplar" al que le ha agradecido que "recale en Cartagena durante la Semana Santa siempre que su apretada agenda laboral se lo ha permitido" y le ha solicitado que, este año, "sería todo un honor si pudiéramos contar con su presencia en las procesiones" del 2022.
Además, el presidente de la Junta de Cofradías también ha querido poner en valor la "ilusión y entrega" de Pilar Jiménez Rubio, haciendo referencia también a que "gracias a su implicación en la vida procesionil ha sido un ejemplo para que otras mujeres asuman cargos de responsabilidad en la Semana Santa de Cartagena", ha dicho de la Cerra.
El hermano mayor californio también hizo especial mención a la recién incorporada hermana mayor del Resucitado, Maríén García Boj, destacando que "es la primera mujer que se convierte en hermana mayor de una cofradía".
El JEMAD ha pronunciado un pregón emotivo y personal en el que recordado su infancia en la ciudad portuaria y puesto en valor los actos que componen la semana grande de “nuestras cofradías pasionarias”, ha dicho López Calderón.
El López Calderón ha destacado que “las procesiones de este año serán sin duda especiales, tendrán un significado extra por lo que significarán de regreso a la normalidad; serán la recompensa al esfuerzo de las Cofradías en ayudar a los más necesitados durante estos años de pandemia; y, también, por el hecho de volver a salir a la calle, su razón de ser, para dar continuidad a nuestra tradición secular y a unos hechos que son centrales en la Historia de la Humanidad”.
Desfiles pasionarios que, como ha destacado la alcaldesa durante la celebración del pregón, "vuelven a nosotros y los recibimos mucho más conscientes de su valor". Arroyo ha asegurado que "esta larga ausencia nos permite ver con mayor claridad que todos ellos componen un tesoro cultural y emocional que debemos proteger porque forman parte de nuestra identidad".
CARTAGENERO AUSENTE
López Calderón ha recordado que, como “cartagenero ausente en Madrid”, vive el anuncio de la Semana Santa “con la mente, la imaginación, puesta en lo que sucede en nuestra tierra natal”. Por este motivo, el día posterior al Miércoles de Ceniza, acuden “ilusionados” a su propia celebración, que han bautizado como Jueves de Ceniza.
“Día en que nos reunimos en la iglesia de Santa Teresa y Santa Isabel, acompañados habitualmente de una representación de las Cofradías y Ayuntamiento de Cartagena, junto a la imagen de nuestra querida Virgen de la Caridad, para participar en la celebración de la Eucaristía y cantar la Salve cartagenera a Nuestra Señora”, ha explicado el pregonero.
“Nunca se me olvidarán esos días previos a la Semana Santa en que acompañando a dos de mis tíos, californios hasta la médula, Juan Alessón y Esteban Calderón, iba a la Cofradía California y ayudaba, o al menos eso creía yo, al inolvidable Balbino de la Cerra en su labor de cargo de guardalmacén general, en su agotadora tarea de sacar y preparar los vestuarios de las distintas agrupaciones que, recuerdo, muchos estaban almacenados en los pisos altos de la cofradía en unos armarios, para mí enormes, y en sitios recónditos y a veces de difícil acceso”, ha recordado también López Calderón.
El JEMAD ha hecho un recorrido por los principales eventos de la Semana Santa poniendo en valor el trabajo de cada una de las cuatro cofradías portuarias, haciendo especial mención a algunos detalles como son los tronos cartageneros y las bandas musicales que las acompañan en su marcha por las calles del casco histórico de Cartagena.
“¿Qué cartagenero no se emociona, no vibra, al escuchar esa música tradicional de nuestra Semana Santa, que se nos graba desde pequeños, más que en la memoria en el alma, y que nos traslada instantáneamente a nuestra tierra cada vez que la escuchamos fuera de ella en el lugar o las circunstancias que sean?”, se preguntaba López Calderón durante el anunciamiento de la Semana Santa.
“Como nos pasa a todos en cierta forma, mi familia y mi lugar de nacimiento, en este caso Cartagena, han modulado de una manera trascendental todo lo que soy: cristiano, militar y marino. Características que se corresponden, que definen una buena parte de lo que es la misma Cartagena y que me identifican con ella”, ha dicho el pregonero.
“Aprovechemos todas las ocasiones que nos traerá esta próxima Semana Santa, la primera que viviremos con cierta normalidad tras la llegada de la pandemia, para seguir los pasos de Cristo, en la liturgia y en las procesiones, convirtiéndonos en un actor, en un personaje más que se encuentra en Jerusalén esos días y participa en aquellos acontecimientos ocurridos hace casi 2000 años, y que ese seguimiento continúe sin interrupción hasta la Semana Santa del año 2023”, ha concluido el pregonero.
Todo el pregón ha estado armonizado por diferentes piezas de Semana Santa interpretadas por la Agrupación Musical Sauces. A la salida del evento, se ha obsequiado a los asistentes el pregón a modo de libro.
Finalizado el pregón, la alcaldesa de Cartagena, Noelia, ha hecho entrega de una placa y un escudo de oro a Teodoro Esteban López Calderón, y el tradicional broche y placa a la nazarena, Pilar Giménez Rubio.
También la Nazarena Mayor del 2020, último año en el que se había llevado a cabo el anuncio de la Semana Santa, Manoli Borrego, le ha entregado a su predecesora, Pilar Giménez Rubio, un ramo de flores como relevo simbólico.
REIVINDICAR EL LUGAR DE LA MUJER EN LA SEMANA SANTA
La Nazarena Mayor 2022 ha comenzado su discurso rememorando el momento en el que la alcaldesa se puso en contacto con ella para comunicarle la decisión de la Junta de Cofradías. "Apenas podía creérmelo, ni si quiera podía hablar, sentía un río de emociones que van y vienen, todas positivas", ha dicho Giménez Rubio. "Ojalá cada mujer de la Semana Santa cartagenera pudiera vivir ese momento, porque esa llamada telefónica es más importante de lo que puedan pensar", ha añadido. Giménez Rubio también ha hecho alusión a su gran mentora: su madre, quien según la nazarena "se lo merecía más que yo".
Además, la Nazarena Mayor ha querido reivindicar el papel de la mujer en la Semana Santa. "Quiero representaros a todas, a las que trabajabais desde la trastienda, a las que antes planchabais túnicas y a las que ahora forman parte de las directivas y tienen la oportunidad de tomar decisiones", se ha dirigido Giménez Rubio a las mujeres de la Semana Santa cartagenera. "Voy a seguir trabajando para que todos, hombres y mujeres, sean iguales", ha añadido.
Un emotivo discurso que puso en pie a todo el público, que aplaudió sin cesar a la nazarena durante varios minutos.
Al pregón de la Semana Santa de Cartagena 2022 han asistido en torno a 600 personas que han acudido al Nuevo Teatro Circo para dar la bienvenida a la Semana Santa en Cartagena: 40 días de pasión, fe, procesiones, olor de incienso, balcones adornados, cantos y tambores que harán que esta tradición perdure a lo largo de la historia.
