Cruz Roja Cartagena celebra el Día de la Banderita, una de las citas más importantes en el calendario de esta organización benéfica, que destinará todo lo recaudado al programa para paliar la soledad en personas mayores.
Se trata de un evento con más de 100 años de historia, que de forma simbólica pretende dar visibilidad al trabajo realizado por los voluntarios y voluntarias de Cruz Roja. Algo que, según el presidente de la Asamblea Comarcal, Andrés Ros, se ha puesto en evidencia más que nunca con la pandemia, y “es algo que le debe la entidad al voluntariado, socios, donantes, empresas y administraciones públicas”.
La alcaldesa, Noelia Arroyo, se ha acercado a la mesa instalada en la Plaza del Ayuntamiento para apoyar a la Asamblea Comarcal de Cruz Roja con el habitual donativo, y para alentarles a seguir ayudando a las personas más vulnerables. “Queremos darles las gracias por todo lo que han colaborado con los cartageneros durante la pandemia y decirles que seguimos necesitándolos para seguir prestando atención a los más vulnerables”, ha dicho Arroyo.
Este evento, que supone una de las mayores fuentes de recursos de Cruz Roja para poder llevar a cabo sus proyectos y conservar su independencia, cuenta con el respaldo de 30 personas voluntarias en este día, aunque son más de 300 los voluntarios habituales de Cruz Roja en Cartagena.
Las ocho mesas se instalan en el Hospital Santa Lucía, El Corte Inglés, y por el caso histórico, en la calle del Carmen, Juan XXIII, Capitanía, Plaza del Ayuntamiento y la Asamblea Regional.
Cruz Roja Cartagena trabaja en seis áreas de conocimiento con programas específicos en materia de empleo, personas mayores (Enrédate es su programa de acompañamiento); voluntariado, transporte adaptado, adherencia terapéutica y juventud, y en este año ha atendido a más de 4.000 personas en nuestra ciudad.
