Poner una fotografía en vez de restaurar el retablo original es inaceptable
En el marco de los presupuestos participativos de 2018, los ciudadanos de Cartagena eligieron de manera mayoritaria la puesta en valor de la Capilla del Concejo, y no poner una fotografía. Se incumple así y de manera flagrante la voluntad de Cartagena, porque en aquella votación no se dio libertad al Ayuntamiento para reconvertir la Capilla del Concejo en un centro de interpretación.
La capilla devino municipal por la donación de D. Pedro Antonio Pereti en el siglo XVIII con el compromiso de mantener allí, a perpetuidad, la devoción a la Virgen del Rosell. Mientras los Cuatro Santos Cartageneros y la talla de la Patrona de Cartagena lucen en el altar mayor de Santa María de Gracia, el Obispado lleva siglos mintiendo sobre Bulas de Traslado y despreciando un edificio religioso importantísimo para la historia de la Diócesis Carthaginense. Este espacio sagrado debería ser objeto de exquisito mimo, cuidado y refinamiento por parte del gobierno municipal. Nada obliga a hacer la chapuza de simular con tablones un retablo y pegar en su trasera un vinilo con la fotografía de Antonio Pasaporte. Esto sería mucho peor que incurrir en un falso histórico y por ello solicitamos la necesaria modificación del proyecto.
Cabe recordar que tras veinte años de intensa lucha por la restauración de la Catedral de Cartagena Santa María la Mayor, logramos que el Obispado cumpliera con la obligación de abrir el inmueble cuatro días al mes para la visita pública, reactivando así el amor adormecido de los cartageneros por su Catedral. Consecuencia inmediata de ello, la Dirección General obligó al Obispado a invertir algo más de 60.000 euros en paliar las deficiencias de conservación que había generado el inmueble tras décadas de abandono. Un logro que no estaba en los planes del Obispo de Cartagena D. José Manuel Lorca Planes, que había inmatriculado el inmueble como un solar.
Actualmente seguimos luchando para que se cumpla la resolución emitida en 2015 por el organismo regional que obliga al Obispado a abrir al público los sábados. El gobierno regional, para ganar tiempo y dar cobertura al Sr. Obispo, nos quiso obligar a presentar alegaciones en un procedimiento "novedoso y fuera de toda cobertura legal" reabriendo de nuevo lo que ya había devenido firme por una resolución que el Obispo incumple con total impunidad.
Tras numerosos trámites que generó un doble silencio administrativo, logramos el Plan Director para la Catedral de Cartagena. Los intentos de tergiversación del gobierno regional siguieron ya que nos rechazaron un recurso, pero al mismo tiempo anunciaron a bombo y platillo el Plan Director, subvencionando con 48.000 euros al Obispado para su elaboración.
Sirvan estas líneas para animar a la Sra. Alcaldesa, que tan cartagenera se vende, a que ponga la fotocopia del retablo en el cabecero de su cama y se limite a lo básico, quitar humedades, sanear cubiertas y recuperación de lo poco que queda sin incurrir en falsos históricos. Es más, si el protocolo que firmó con el Ministerio de Fomento va en la misma línea y su concurso de ideas va a transformar la memoria de Cartagena en un escenario insulso, le agradeceríamos que se fueran a murciar nuestra identidad a otra parte.
Plataforma Ciudadana Virgen de la Caridad