La pandemia también viene con el centralismo debajo del brazo. Miles de cartageneros realizan sus compras de alimentación a través de internet por el miedo al contagio por coronavirus. El hipermercado Carrefour, con dos centros comerciales en el municipio de Cartagena, prepara y envía sin embargo todos sus encargos on line con destino a la ciudad portuaria o sus diputaciones desde la ciudad de Murcia. En concreto, desde su sede de las Atalayas junto al palacio de deportes de la capital del Segura. Y, por lo tanto, los pedidos de los cartageneros a través del ordenador crean trabajo sólo más allá del puerto de la Cadena.
La otra gran superficie que habilita una página web para que los cartageneros reciban en casa los productos de su supermercado sí utiliza sus dependencias de Cartagena. El Corte Inglés organiza tanto la preparación de los productos como la logística del reparto desde sus instalaciones en la Alameda de San Antón. Así, tanto sus ventas de forma presencial como a distancia generan empleo y riqueza en la ciudad trimilenaria.
El resto de supermercados de Cartagena suspendieron los pedidos por internet poco después del inicio de confinamiento y aún en estos momentos mantienen inactivo este servicio. Es el caso, por ejemplo, de Mercadona que durante la pandemia sólo mantiene su portal web preparado para envíos a domicilio en las ciudades de Valencia y Barcelona.
