El pasado 27 de noviembre quedaba constituida la Junta Vecinal municipal de Los Dolores, bajo la presidencia del Partido Popular. Casi tres meses después, los vecinos y, por ende, el resto de formación políticas que integran este órgano de gestión siguen esperando que la presidente considere idóneo la celebración del primer pleno ordinario de la legislatura.
Esta circunstancia ha sido valorada por uno de los vocales cartageneristas en la Junta Vecinal, Rafael Rodríguez, lamentando que "los perjudicados de este retraso injustificado son los vecinos, porque les niegan que puedan ser debatidas y aprobadas iniciativas que recogen las prioridades y necesidades del barrio".
"Desde MC sí seguimos haciendo nuestro trabajo, y diariamente tenemos reuniones con particulares y colectivos que nos expresan las carencias y deficiencias de nuestro barrio. Pero, por desgracia, estas propuestas para impulsar Los Dolores duermen en un cajón por la inoperancia de la presidencia, quien, una vez asegurado el sillón, debió pensar que todo el trabajo estaba hecho", ha argumentado Rodríguez.
Medidas para garantizar la seguridad, mejora de carreteras y conservación del patrimonio
Acto seguido, el vocal cartagenerista ha pasado a enumerar la batería de propuestas, ya trabajadas por MC Cartagena, que esperan la oportunidad de ser presentadas para su posterior ejecución.
"Existen problemas de seguridad, como la peligrosa torreta eléctrica ubicada en la calle Río de la Plata por la que transitan numerosos vehículos y que conlleva un peligro considerable desde hace años. Además, hay otras iniciativas urgentes que necesitan ser tratadas como el acondicionamiento de la carretera que conduce al camino del Sifón a la altura de las casas del Retiro; el traslado del paso de peatones en la calle Tibidabo o la limpieza y mantenimiento del castillo del Marqués de Fuente Sol, conocido en nuestro barrio como el Castillito", ha enumerado Rafael Rodríguez.
Por último, el vocal de MC ha añadido que los problemas descritos "son necesidades urgentes para los vecinos, en algunos casos en asuntos que afectan su día a día y, en otros, en cuestiones que buscan proteger el patrimonio por el que una administración debe velar. La pelota está en el tejado de la presidencia; debe decidir si sigue emulando a sus compañeros del Ayuntamiento, paralizando Los Dolores, comienza a trabajar, o al menos, deja a los que quieren hacerlo".