"El Pleno municipal aprobó hace un año la edificación de otra sede vecinal y ahora el concejal de Infraestructuras, Juan Pedro Torralba, niega la ejecución de la obra"
"Papel mojado. Así quedan las mociones que aprueba el Ayuntamiento de Cartagena. El Pleno municipal sacó adelante hace un año la construcción de un nuevo Local Social en La Azohía. La obra asumiría una importante ayuda económica del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Leader). Pero ahora el concejal de Infraestructuras y Descentralización, Juan Pedro Torralba, asegura a los vecinos que carece de terrenos y que la edificación de la más que necesaria sede vecinal no tendrá lugar.Ni una sola alusión además hace el edil socialista y primer teniente de alcalde a la partida comunitaria con la que contaba, según el propio Consistorio, hace sólo doce meses.
Los habitantes de esta localidad costera de la zona oeste muestran un gran enfado por esta marcha atrás. La presidenta de la Asociación de Vecinos de La Azohía, Josefa Agüera, explica al Partido Cantonal que incluso Torralba les había prometido la adecuación de una antigua capilla en la playa de San Ginés como ubicación para el local social. "Todo ha quedado en agua de borrajas. Tanto PP, como MC y como PSOE dieron su palabra sobre que tendríamos un nuevo lugar de reunión ante las carencias del actual. Todos nos han engañado", lamenta Agüera. En este sentido, la Asociación para la Defensa del Entorno Natural de La Azohía (Adela) acumula ya doce años de peticiones al Ayuntamiento con el propósito de que los distintos colectivos del pueblo tengan un sitio de reunión "decente", según las propias palabras de su presidente, Josué Pérez. Este grupo ecologista apuesta por el acondicionamiento del antiguo cuartel de la Guardia Civil como un centro multiusos.
En esta población del litoral cartagenero existen tres asociaciones de vecinos (La Azohía, San Ginés y La Chapineta), una asociación de mujeres, otra de la tercera edad, una cultural-deportiva y una última de carácter medioambiental. Todas comparten dos pequeños habitáculos detrás de la iglesia construidos hace más de treinta años y sin espacio para ningún otro tipo de servicio complementario como cantina o sala de reuniones.
El presupuesto municipal del año pasado recogía además mejoras en el consultorio médico de La Azohía que ocupa una tercera habitación, también de reducidas dimensiones, al lado de las de los vecinos. Ni un solo ladrillo ha movido el Ayuntamiento desde la aprobación de las cuentas municipales de 2018. Los pacientes solicitan al menos una sala de espera y accesos para personas con movilidad reducida."
