La concejalía del área de Cultura y Patrimonio Arqueológico que dirige Ricardo Segado (MC Cartagena) ha finalizado, en fechas recientes, los trabajos de restauración del pretil original de la muralla de Carlos III.
De esta forma, desde el área competencial del también primer teniente de alcalde se da solución a una circunstancia originada por la caída accidental de una rama de gran peso, perteneciente a un ficus centenario situado frente a la fachada principal del antiguo Hospital de Marina.
Tras este hecho, desde el departamento de Infraestructuras se procedió a la retirada de la rama para facilitar la valoración de los daños, emitida por la coordinación municipal de Patrimonio Histórico y Arqueológico. Este estudio reveló que los daños ocasionados por el gran peso de la rama, con un diámetro aproximado de un metro, había provocado el arranque y desmontaje de la línea superior de mampostería de caliza del pretil de la construcción murada, de unos cuatro metros.
Así, se determinó que la fuerza del impacto fue de tal magnitud que parte de la mampostería se desmoronó, cayendo unos diez metros a la zona inferior de la muralla, lo que provocó la fracturación de varios sillares.
Esta situación, unida al peligro inminente de desplome, aconsejó la redacción de un proyecto de restitución del tramo afectado, así como su envío a la Dirección General de Bienes Culturales de la CARM, al objeto de solicitar la preceptiva autorización, ya que se requería actuar sobre un elemento patrimonial declarado Bien de Interés Cultural (BIC).
Contenido de la actuación
Los trabajos, finalizados durante la segunda quincena del pasado mes de diciembre, consistieron en la toma de datos y mediciones de la zona a restaurar; la limpieza de la zona afectada, así como la retirada de elementos sueltos y morteros descohesionados, al tiempo de consolidar la superficie de mortero antiguo con agua de cal.
Posteriormente, se fabricó mortero de cal y árido de granulometría semejante al original, procediéndose a la reconstrucción con sillares originales. Para estos fines se ha contado con la ayuda de una plataforma elevadora y un camión grúa, que ha solventado las grandes diferencias de cota de la zona de trabajo.
La restitución del pretil ha sido supervisada por la coordinadora municipal de Patrimonio Histórico y Arqueológico, Mari Carmen Berrocal, realizándose bajo los criterios de mantenimiento de la sólida obra del siglo XVIII, aplicando materiales y técnicas similares a las originales, si bien la zona restaurada se ha separado de la antigua mediante una malla de fibra de vidrio. Ello, para cumplir con la normativa vigente en relación a la Ley de Patrimonio Histórico.