Un grupo de jóvenes estudiantes de Secundaria y Bachillerato han desenterrado esta semana huesos en un parterre de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT). La escena no pertenece a una broma macabra, sino a un taller práctico de medicina legal forense que forma parte de los proyectos de divulgación del Campus Científico de Verano (CCV) Mare Nostrum que se celebra a lo largo de este mes.
Los alumnos del proyecto ‘La resolución científica de los delitos’ realizan talleres de psicología forense, entomología y medicina legal durante cada una de las semanas que duran los turnos del Campus, en las que también visitan la comisaría de Policía Nacional de Cartagena.
Las prácticas incluyen la recogida de indicios y pruebas de un supuesto delito. “Enterramos huesos y una camiseta con pelo para que determinen, mediante diagnóstico de especies, si se trata de restos humanos o animales”, explican las investigadoras en peritaje legal de la Facultad de Medicina de la Universidad de Murcia Cristina Pérez y Gemma Prieto.
Como en toda escena criminal que se precie, la recogida de pruebas se atestigua con fotografías de cada uno de los detalles encontrados. El procesamiento de las pruebas en los laboratorios de la UPCT incluye el diagnóstico de la talla y sexo del individuo a partir del fémur y la pelvis encontrados bajo tierra.
Las actividades formativas del CCV Mare Nostrum, que por primera vez coordina la Unidad de Cultura Científica de la UPCT, se distribuyen en cuatro proyectos de investigación, que además de las ciencias forenses abarcan la ingeniería hidráulica, la astronomía y los vehículos de eficiencia energética.
Los Campus Científicos de Verano están organizados por los Campus de Excelencia Internacional del Ministerio de Economía y Competitividad y la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (Fecyt) del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte y cuentan con patrocinio de la Obra Social La Caixa.