El portavoz de Ciudadanos Cartagena, Manuel Padín, también preguntará qué ha pasado con la 'colaboración activa' con el Banco de Libros de la FAPA ya que desde que se aprobara por unanimidad, en septiembre de 2015, la moción que obligaba al Ayuntamiento de Cartagena a potenciar este instrumento para aliviar la carga económica de las familias cartageneras, nada se ha hecho
Ciudadanos Cartagena ha recogido alguna de las reclamaciones de la Federación de Asociaciones de Padres (FAPA) que han aparecido en los medios de comunicación en las últimas semanas, entre ellas, su exigencia al concejal de Cultura, y Educación, David Martínez, de convocar de una vez el Consejo Escolar Municipal, que por normativa tendría que haberse convocado, al menos uno, en el primer trimestre, así como también la reunión de la Comisión Permanente, cuya periodicidad ha de ser mensual.
El portavoz de Ciudadanos Cartagena, Manuel Padín, ha manifestado su preocupación ya que desde "que se iniciara la legislatura, el concejal de Educación, David Martínez, no haya convocado un solo Consejo Escolar Municipal, aunque es obligatorio hacerlo durante el primer trimestre de año escolar". Este Consejo, no convocado, tiene atribuidas importantes funciones, tal y como aparecen en su Reglamento Interno, que no deberían haberse ignorado, como la de recoger las inquietudes de la comunidad escolar de Cartagena, procurar una óptima distribución de los distintos recursos que el Ayuntamiento destina a Educación o establecer un marco de participación de los distintos sectores de la comunidad educativa en el municipio, y estudio de la problemática escolar y propuestas de posibles soluciones en diferentes actuaciones en el campo educativo.
Según el portavoz de la formación naranja, el concejal está "incumpliendo sus obligaciones, y no es la única, tampoco sabemos nada de la 'colaboración activa' del Ayuntamiento con el banco de libros de la FAPA, que fue un mandato plenario de septiembre de 2015 impulsado por nuestro grupo". Desde Ciudadanos consideramos muy grave esa dejación de funciones por parte de la máxima autoridad municipal en Educación. Este Grupo municipal presentó en septiembre de 2015 una moción (aprobada por unanimidad) en la que ordenaba al Ayuntamiento a potenciar y colaborar activamente con el Banco de Libros creado por la FAPA. La entrada en vigor de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) obligó a los alumnos que cursan Educación Infantil, Primaria y Secundaria a renovar todos sus libros de texto. Para muchos padres, esta obligación suponía una fuerte carga económica, teniendo en cuenta que cada libro tiene un coste medio de 30 euros.
En el "banco de libros" los manuales están a disposición de los padres por tan solo 11,50 euros y, si se está asociado a una AMPA, por 7,50 euros. Se trata de un precio un 60 por ciento más baratos que en las librerías. Para poner en marcha esta iniciativa, la FAPA ha invertido ya unos 12.000 euros, y esperaba recibir alguna ayuda municipal específica, pero finalmente no se ha producido.