Con motivo de la celebración del Día Internacional del Migrante, el pasado sábado tuvo lugar una Marcha Solidaria, organizada por la Asociación ACCEM y Cruz Roja, que contó con la colaboración del Ayuntamiento de Cartagena, a través de las Concejalías de Deportes y Servicios Sociales.
La marcha se enmarcó en las actividades que, desde diferentes entidades sociales y en colaboración con el ayuntamiento, se habían programado para la conmemoración del Día Internacional de las Migraciones, que se celebra el 18 de diciembre.
La marcha solidaria reunió a más de un centenar de personas, que quisieron apoyar en esta campaña de sensibilización y acercamiento al drama de los refugiados y de las personas inmigrantes, que están teniendo que salir de sus países por muy diferentes motivos .
Cartagena es una de las fundadoras de la Red de Ciudades Interculturales (RECI) y es una de las ciudades que acoge refugiados y así lo proclamó el Pleno Municipal el pasado 7 de septiembre cuando se aprobó la adhesión de Cartagena a la red intermunicipal de ciudades de acogida de refugiados.
Esta actividad contó con la participación y colaboración del deportista cartagenero Andrés Lledó, quien ha querido mostrar su apoyo para dar a conocer una realidad que, desde su propia experiencia profesional, vive diariamente, cuando tiene que intervenir en los rescates de personas que intentan llegar a nuestras costas.
La marcha se realizó en un ambiente muy agradable, amenizada por la música de algunos jóvenes, que quisieron aportar esa alegría y fuerza que les ayuda a superar situaciones difíciles.
Tras la realización del recorrido, trazado y guiado por Andrés Lledó, se volvió a dar lectura al Manifiesto Institucional, a cargo del deportista que apadrinó la actividad, de representantes de Accem y Cruz Roja.
Para finalizar, el Circulo del Silencio recordó la elevada cifra de personas que están perdiendo la vida e hizo un llamamiento a los responsables y gobernantes para acabar con este grave movimiento migratorio, que está poniendo en peligro la vida de familias enteras.
Una vez más, la apuesta por hacer de Cartagena una ciudad solidaria y acogedora, aglutinó a personas que salieron a la calle, para apoyar a los que está huyendo de la guerra, del hambre e intentando poner a salvo su vida y las de sus familias.