La Asociación de Fibromialgia y Síndrome de Fatiga Crónica de Cartagena y Comarca ha conmemorado esta mañana el Día Internacional de estas enfermedades con la lectura del duodécimo manifiesto, leído por la presidenta de la asociación, Toñi Díaz Delgado en la puerta de la Asamblea Regional. La alcaldesa de Cartagena, Pilar Barreiro y el concejal de Atención Social, Antonio Calderón han asistido en señal de apoyo.
Durante la lectura del manifiesto, la presidenta, en representación de AFIBROCAR, ha explicado la incomprensión que sienten como enfermos. También ha puesto de relieve el servicio social que tiene la asociación pero que necesitan que se les apoye mediante acciones concretas y la implicación de la sociedad.
La fibromialgia y el síndrome de fatiga crónica son dos enfermedades en las que el dolor y el cansancio son protagonistas de sus vidas, algo con lo que tienen que vivir. AFIBROCAR, como otras asociaciones, pretende que se les reconozca como enfermos y puedan tener un tratamiento que les ayude a tener una mejor calidad de vida.
La asociación está creada desde el año 2001, y está compuesta por más de 300 socios. AFIBROCAR tiene diversos medios, gracias a la cuota mensual de los socios o a ayudas de estamentos como la Asamblea Regional, el Ayuntamiento de Cartagena o la Comunidad Autónoma, que les ayuda a proponer un tratamiento alternativo, en el caso de que la farmacológica no funcione, como talleres de yoga, danza terapéutica, estiramientos, marcha nórdica, sesiones de balneario, fisioterapia, psicología, etc., según ha explicado la presidenta de la Asociación.
Por este motivo, la asociación ha puesto de manifiesto las principales necesidades que permitan mejorar la calidad de vida de los enfermos y la de sus familias. Entre estas necesidades, Toñi Díaz, presidenta de AFIBROCAR ha mencionado:
-El reconocimiento de la enfermedad por parte de profesionales, instituciones, agentes sociales y sociedad en general.
-La investigación para lograr un mejor diagnóstico, tratamientos y detección precoz.
-La mejora de la atención sanitaria y el establecimiento de protocolos unificados que garanticen la igualdad en la calidad y la accesibilidad a los recursos y servicios del Sistema Público de Salud.
-El acceso al trabajo, sea mediante la adaptación de los puestos de trabajo, sea mediante nuevas fórmulas de inserción laboral.
-Las justas prestaciones sociales cuando la gravedad de la enfermedad no permita trabajar.
A lo largo del día se han desarrollado distintas mesas informativas en diferentes lugares como la Asamblea Regional, El Corte Inglés, el Hospital Universitario Santa Lucía y el Hospital Universitario Virgen del Rosell, Centro de Salud San Vicente, Consultorio del Barrio de la Concepción, el Centro de Salud Puerto de Mazarrón y el Centro de Salud de Mazarrón, donde cualquier interesado puede acercarse a pedir información sobre AFIBROCAR.
¿Qué es la fibromialgia?
Es una alteración del sistema sensorial y que provoca como síntoma el dolor persistente en distintas áreas de nuestro cuerpo, tristeza, sueño no reparador, depresión, ansiedad, problemas cognitivos, trastornos intestinales o urinarios y vasculares. También se manifiesta con rigidez muscular, agotamiento y cansancio.
La fibromialgia constituye una de las situaciones más representativas de dolor crónico en la población y uno de los problemas sanitarios más actuales en los países de desarrollo. Esto se debe a que se trata de un proceso crónico con una elevada prevalencia, estimada en la población general española en un 2,4% (4,3% en mujeres y 0,8% en varones), una calidad de vida ampliamente afectada, sobre todo en las áreas de función física, actividad intelectual y estado emocional, y calidad de sueño, lo que influye de forma determinante sobre la capacidad para trabajar, el rol familiar y social.
¿Qué es el Síndrome de la Fatiga Crónica?
Conocida también como enfermedad por intolerancia sistémica al esfuerzo, presenta una sintomática amplia y diversa como una intensa fatiga física y mental que no mejora con el reposo y empeora con cualquier tipo de actividad. Existen entre 350 y 430 afectados por cada 100.000 habitantes, y de forma más frecuente en mujeres.