El compromiso de Izquierda Plural (la coalición integrada por Izquierda Unida-Verdes y Socialistas por Cartagena) de reformar la forma de hacer política, apostando por la regeneración y la democracia participativa, así como democratizando las instituciones y comprometiendo un comportamiento ético de los representantes públicos, tendrá una de sus máximas expresiones, caso de llegar a la Alcaldía, en la eliminación total de todos los coches oficiales y de los escoltas -suprimiendo así ese comportamiento autocrático y de pompa y boato que tanto gusta a los actuales dirigentes del Partido Popular-, y los gastos de protocolo y los de publicidad y propaganda que, en la mayoría de las ocasiones, se viene utilizando a beneficio del partido que ocupa el poder en este momento. Del mismo modo, la coalición de izquierdas acometerá una reducción de los cargos de libre designación, reduciéndolos a lo imprescindible para el funcionamiento de la institución y la labor política de Gobierno y oposición de los grupos municipales que salgan de las urnas el próximo 24 de mayo.
Tal propuesta obedece a que, para Izquierda Plural, y para su candidato, "el político tiene que ser igual a cualquier ciudadano de a pie, utilizando los transportes públicos como hace cualquier otra persona cuando tiene que desplazarse de forma que no sea a pie, que es otra forma de acudir a los lugares donde se requiera la presencia de un representante público, y más en una ciudad como Cartagena, que es una ciudad para andarla y donde no hay justificación de uso de coches oficiales para trasladarse algunos pocos kilómetros".