El Partido Popular ha rechazado la moción conjunta, presentada por los tres grupos de la oposición (PSOE, IU-Verdes y MC) a petición de diversos colectivos del barrio, para que el Ayuntamiento se sumara al denominado "Manifiesto Fénix", documento realizado, con el apoyo de dichas fuerzas políticas y de otras sin representación municipal, para llevar a cabo la necesaria regeneración integral de dicha barriada cartagenera, consiguiendo con ello terminar con esa etiqueta de zona de exclusión social que cuelga sobre el barrio. El manifiesto expresa el apoyo de todos los firmantes al desarrollo e implementación gradual y sostenible de un Plan de Intervención Integral, a desarrollar entre los años 2015 y 2019 con la colaboración y el trabajo conjunto y permanente entre la sociedad civil, los residentes en el barrio, afectada y las diversas instancias políticas, económicas y sociales. Los 18 puntos en los que se ha estructurado el manifiesto comprenden intervenciones en patrimonio e infraestructuras, vivienda, salud, educación, protección a la infancia y juventud e intervención comunitaria, empleo y seguridad ciudadana, todos ellos de clara competencia municipal, por lo que desde PSOE, Izquierda Unida-Verdes y Movimiento Ciudadano se cree que el Consistorio debe comprometerse con el plan de forma incondicional. Con ello se daría satisfacción a las demandas consensuadas de colectivos y entidades de Los Mateos como la Asociación de Vecinos, Parroquia San Isidoro, Asociación de Mujeres Armonía, Hermanas de la Sagrada Familia, CEIP Aníbal, Comunidad Musulmana, Culto Gitano, AMPA CEIP Aníbal Banda de Cornetas y Tambores La Buena Unión, Asociación Rascasa y Consultorio Médico.
Todo ese movimiento social ha sido rechazado por el equipo de Gobierno del Partido Popular asegurando que se ha realizado con carácter electoralista y que en la actual legislatura se ha invertido en el barrio la "enorme" cantidad de 325.000 euros y las actuaciones que diversas instituciones de carácter benéfico han desarrollado en Los Mateos. Tras el rechazo llevado a cabo por el equipo de Gobierno municipal, varios vecinos del barrio han mostrado su indignación y han sido expulsados de la sala por la alcaldesa, Pilar Barreiro.