Los gobiernos autonómicos y municipal del PP decidieron este verano que los conductores que accedieran al Parque Natural de Calblanque debían pagar una tasa de 4 euros por disfrutar de este espacio protegido. Además decidieron que la recaudación y el control de acceso lo realizará una empresa privada.
El argumento utilizado fue que esta fórmula mejoraría el entorno del parque porque además de protegerlo de las emisiones contaminantes de los vehículos proporcionaría un dinero que sería reutilizado en el mantenimiento, conservación y mejora del Parque Natural.
Han transcurrido ya prácticamente 6 meses desde que se puso en marcha esta fórmula, que nosotros no compartimos, y hasta la fecha no se conoce el dinero recaudado, el destino del dinero, las posibles obras realizadas, el importe de las mismas y los adjudicatarios de dichas obras. Asimismo no tenemos constancia de quién es el encargado de redactar los pliegos de condiciones, de adjudicar las obras, de vigilar su exacto cumplimiento y de asegurar que todo se hace de acuerdo con la normativa medioambiental propia de un espacio natural de estas características.
Como hemos tenido conocimiento que al menos se realizado una obra, no parece que muy importante, pero obra al fin y al cabo, es necesario que la Administración competente en este caso la Consejería de Medio Ambiente de las oportunas explicaciones, puesto que los ciudadanos tienen derecho a conocer el destino de ese dinero que se recaudó mediante una fórmula cuándo menos poco ortodoxa.