El embajador de Egipto en España, Ayman Zaineldine, ha analizado esta mañana en el II Foro Oriente Medio de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) la "enorme transición" que vive su país, un proceso que ha admitido complicado. "Todos los cambios son turbulentos y difíciles", ha explicado a los medios de comunicación.
Zaineldine, que dirige la Embajada egipcia en España desde 2010 y que ya participó en 2011 en la primera edición del Foro Oriente Medio que organiza la UPCT, ha afirmado que su país intenta "aprender de transiciones exitosas como la de España" y ha asegurado que la nueva constitución será votada en referéndum el próximo mes y que habrá elecciones democráticas antes de mediados de 2014, en las que podrá participar "cualquier egipcio sin problemas con la ley".
El diplomático ha explicado que la crisis que llevó al golpe militar del pasado verano y al arresto del presidente electo Mohamed Mursi tuvo su origen en constitución elaborada por los Hermanos Musulmanes y ha afirmado que la nueva carta magna del país "estará por encima de la Sharia, la religión tendrá un peso similar al anterior a la Revolución y se cumplirán todos los estándares internacionales de derechos, libertades y separación de poderes". Respecto al juicio a Mursi, que se celebrará en enero, Zaineldine ha mantenido que "el tribunal es independiente". "Nada es normal en una transición", ha respondido a la pregunta sobre la anormalidad de que los dos expresidentes egipcios, Mursi y Mubarak, se encuentren bajo arresto.
El embajador ha defendido la seguridad de su país para los turistas, cuyo número ha caído un 35% desde el inicio de la Revolución. "Ni un solo turista ha sido atacado, ninguno ha resultado herido por cuestiones políticas", ha afirmado antes de admitir que para los extranjeros "no es una buena idea participar en manifestaciones, aunque no está prohibido". El diplomático ha reconocido que aún es pronto para calificar de pacífica la situación del país, aunque ha explicado que "las protestas son ahora menos violentas".
Aunque ha señalado que "cada país toma su propio camino", Zaineldine se ha mostrado confiado en que "el mundo árabe va a cambiar profundamente" y ha negado que la Primavera Árabe fuera un error. "No lo fue en absoluto", ha expresado con la misma rotundidad con la que ha descartado que su país vaya a sufrir una guerra civil.
El II Foro Oriente Medio de la UPCT, que se celebra en la Facultad de Ciencias de la Empresa, reúne las conferencias de hasta nueve diplomáticos de países de la zona o relacionados con los diferentes escenarios de la llamada Primavera Árabe.