Unos 70 negocios han conseguido en los últimos dos meses la autorización municipal correspondiente para ponerse a funcionar, mediante un trámite reducido de 10 días, denominado licencia express.
El concejal del área de Urbanismo, Patrimonio y Medio Ambiente, Joaquín Segado, se ha mostrado satisfecho con estos primeros datos, que evidencian la bondad de la medida destinada a eliminar trabas administrativas innecesarias y apoyar las iniciativas emprendedoras.
La ordenanza que regula las actividades express entró en vigor el pasado 9 de abril. Consiste en una normativa municipal que reduce considerablemente los plazos de concesión de licencias a diez días y afecta a cerca del 70 por ciento de los negocios que se abren en Cartagena, según el concejal.
En concreto, los que ya han sido autorizados son pequeños comercios de ropa, bisutería, despachos, oficinas de empresa, panaderías, papelerías y peluquerías, entre otras.
Segado considera esta medida como una apuesta clara por la pequeña y mediana empresa, ya que en una plazo de una semana y media, cualquier emprendedor puede tener todo listo para funcionar de forma legal.
El concejal ha concluido afirmando que el Ayuntamiento va a profundizar en esta línea de apoyo a las iniciativas empresariales, en la misma línea también en la que trabaja el Gobierno de la Nación de cambiar la legislación para agilizar los trámites administrativos.
COMUNICACIÃ"N PREVIA Y DIEZ DIAS
La ordenanza de simplificación administrativa o de licencia express como se le conoce, agiliza el otorgamiento de licencias de actividad, sustituyendo el trámite de otorgamiento de licencias por una simple comunicación previa, en aquellas actividades que no requieran procedimientos especiales: en concreto, todos los referentes a cambio de titularidad, nueva actividad en comercios de no más de 1.000 metros cuadrados o bares sin música.
Fuera del ámbito de la licencia express quedan las actividades que requieran autorizaciones ambientales especiales, como es el caso, de actividades ganaderas, y las que se desarrollen en entornos protegidos desde el punto de vista patrimonial o en edificios catalogados, que tendrán que seguir su trámite habitual.
El procedimiento de comunicación previa consiste en informar al Ayuntamiento con 10 días de antelación que se va a poner en marcha un negocio, presentando tres anexos: la declaración del responsable de cumple los requisitos necesarios, el certificado técnico urbanístico y el certificado de instalaciones, documentos con los que en el plazo antes citado, puede comenzar su actividad legalmente.
Otra de las novedades de esta ordenanza es que introduce la obligatoriedad de que toda la documentación se presente en soporte informático, con lo cual todos los expedientes se alojarán en servidores seguros a los que podrán acceder técnicos y jurídicos.
