PABLO RUIZ PICASSO, RAMÓN GAYA Y PEDRO FLORES
Pintura
'Paris, Paris'. Artistas españoles de la escuela de París
Del 7 al 31 de julio
GALERÍA BISEL
C/ Sagasta, 7
Telf: 968503197
De lunes a viernes
Mañana: 10:00- 14:00
Tarde: 18:00 ¿ 21:00
A finales del siglo XIX París tomó el relevo a Roma como meca del Arte. De este modo se comenzaron a marcar las pautas en lo referente a la producción artística para el arte contemporáneo que no se concibe sin la mención de la capital francesa y de la propia Escuela de París. Así, la Escuela de París se convierte en un referente obligado cuyo concepto y denominación no sólo engloba cierta imprecisión sino incluso controversia en cuanto a su definición. La Escuela de París desde un punto de vista histórico-artístico es tan amplia como casi inabarcable puesto que en ella, casi a modo de cajón de sastre, se suelen ubicar los más diversos modos y tendencias de entender el arte con sus correspondientes artistas.
Si realmente ni histórica ni artísticamente existe esta nueva escuela, hay que reconocer que la mayoría de los historiadores y críticos de arte aprovechan su existencia para agrupar en ella una serie de artistas españoles que a lo largo del siglo XX partieron con un concepto más alejado de lo académico y con mayor creatividad. Si bien no existe constancia ni prueba de una Escuela de París, como aproximación conceptual se puede afirmar que en ella se dieron cita artistas procedentes de un gran número de países que buscaban cultivar y manifestar su talento en un entorno apropiado para ello. La libertad creadora y el espíritu renovador constituían los ejes sobre los que giraba la esperanza de los artistas llegados de todo el continente. Parece generalmente aceptado que una de las características principales de la Escuela de París era precisamente que sus artistas procedían del extranjero - desde el punto de vista francés - por lo que no se suele incluir artis tas de aquel país en esta ilustre lista. Sea como fuere, se trataba de un carácter primordialmente cosmopolita que reflejaba la esencia de la ciudad francesa como capital del arte.
Otro elemento definitorio de la Escuela de París se encuentra en la figura del marchante y poeta polaco Léopold Zborowski que promocionó parte de los pintores de dicha escuela entre los que desde la órbita española se puede mencionar a Joseph de Togares y Manuel Humbert. Volviendo a los artistas españoles de la Escuela de París conviene reconocer el escaso eco que en el momento de las vanguardias históricas estas nuevas tendencias tenían en España. Generalmente, los artistas que van llegando a la capital francesa desconocen la obra de estos grandes maestros. Es innegable que el cruce de ideas y vivencias con otros grandísimos creadores en la ciudad de la luz fue enormemente enriquecedor para nuestros artistas de la Escuela de París como en el caso Matisse, Braque, Modigliane, Chagall, De Chirico, y un larguísimo etcétera. Sin embargo, destaca el magisterio de Pablo Ruiz Picasso sobre los pintores españoles. Este es el caso de una larga relación de artistas que atraviesan una etapa más o menos abiertamente picassiana, sin olvidar la influencia de otros dos privilegiados maestros, Dalí y Miró.
Artistas representados en la exposición:
PABLO RUIZ PICASSO: (Málaga 1881-Mougins 1973); RAMON GAYA: (Murcia 1910-Valencia 2005); PEDRO FLORES (Murcia 1897-París 1967)