Con una destacada actuación inició temporada el rejoneador Agustín Solano, que ha realizado una de las mejores faenas de su vida.
Su actuación con el quinto, que se premió con una oreja a pesar de que el público solicitó con insistencia la segunda, rozó la perfección desde que se abrió el portón del chiquero hasta que Solano cogió las rosas. Con ellas y con el acero de muerte no estuvo tan acertado como en el resto de la faena, en la que rayó a una gran altura.
De hecho clavó los dos rejones de castigo con contundencia y precisión; y también logró brillar en banderillas montando a “Miguelete”.
Tanto arriesgó que incluso dos de sus cabalgaduras, “Lima” y “Batido”, estuvieron a punto de sufrir sendos percances.
Por todo ello merece un puesto en la final, que se celebrará el próximo 31 de enero.
Antes, en la faena a su primero, no terminó de acoplarse.
Tarde fría, con nevada en los exteriores de la moderna plaza cubierta de Atarfe, en la que pasearon también una oreja cada uno los rejoneadores Oscar Rodríguez Gaona y Ruiz Miguel Guerra. Intervinieron con gran lucimiento los Forcados Amadores de Arronches.