La prevención y el mantenimiento de los tratamientos, claves en los buenos resultados
Según datos de la Unidad de Medicina Infecciosa del Hospital Universitario Santa María del Rosell de Cartagena se han detectado este año 65 nuevos casos de VIH positivos en la localidad. En la actualidad, se está haciendo seguimiento en consulta de unos 900 pacientes, de los cuales aproximadamente un 30 por ciento ha desarrollado SIDA, aunque este porcentaje corresponde en su mayoría a pacientes heredados de los comienzos de la actividad de la Unidad y no a nuevos casos.
Además, desde el inicio de la epidemia en 1983 hasta hoy se han atendido en la Unidad del Rosell 1.212 pacientes, lo que representa una tasa elevada de personas con infección VIH en el Área de Salud II de Cartagena. Como consecuencia de este hecho, la Unidad de Medicina Infecciosa del Hospital Universitario del Rosell de Cartagena ofrece a las personas que han desarrollado la enfermedad del VIH una consulta a demanda de esta afección, y por la que se atiende a los pacientes con VIH seropositivos que acuden a ella sin cita programada, con consultas específicas o dudas sobre cualquier problema relacionado con su infección.
La razón, entre otras, es la importancia de la continuidad de los tratamientos en los pacientes que han desarrollado esta enfermedad, fundamental para garantizar unos buenos resultados, y de ahí que se haya habilitado en el Rosell la posibilidad de que estos pacientes que acudan a la consulta sin cita puedan ser atendidos.
Por eso, según el jefe de sección de la Unidad de Medicina Infecciosa del Rosell, José Adolfo García, “la continuidad del tratamiento por estos pacientes es vital para que puedan llevar una vida absolutamente normal”. Y, añade, “por eso la Unidad se vuelca en dar a los pacientes toda la ayuda que puedan necesitar para sobrellevar la enfermedad, los atiende cuando lo demandan por necesidades específicas, con el fin de no poner en riesgo los buenos resultados que se están obteniendo con los tratamientos”.
Evolución del virus VIH en Cartagena
La Unidad de Medicina Infecciosa inició su actividad con los primeros casos en el año 1983 y, desde entonces, ha constatado una importante evolución en las causas y tipologías de la población de Cartagena.
En este sentido, la mortalidad de estos pacientes ha descendido considerablemente. Esta tasa, que era muy elevada en los comienzos debido a los primeros tratamientos con antiretrovirales no efectivos y al desarrollo conjunto de otras enfermedades que suelen presentarse asociadas al VIH como las infecciones oportunistas, se recortó gracias al éxito de los tratamientos específicos y de alta eficacia con fármacos, iniciados en el periodo 1995-1996. Desde entonces, las probabilidades de sobrevivir a esta enfermedad son muy altas y, en este sentido, la mayoría de los pacientes en activo de la Unidad de Medicina Infecciosa del Rosell son enfermos crónicos que pueden sobrellevar su enfermedad si respetan la continuidad en el tratamiento.
Originariamente, la mayoría de casos que se infectaban en el ámbito de Cartagena lo hacían por vía intravenosa. Ahora, la causa principal de contagio es la transmisión sexual derivada del incremento en la variedad de las relaciones sexuales.
La movilidad geográfica y la inmigración han sido un factor importante en la propagación de la enfermedad. A partir del 2002, del porcentaje de casos nuevos detectados, aproximadamente un 30 por ciento han sido inmigrantes, representando una tendencia al alza hasta los dos últimos años en que comienza a estabilizarse e incluso a empezado a disminuir.
Uno de los indicadores de la eficacia de los tratamientos es que se ha logrado que desde 1995 todas las mujeres embarazadas monitorizadas y tratadas en la consulta de la Unidad del Rosell, en colaboración con el servicio de tocoginecología, hayan tenido niños que no son portadores del VIH. En estos casos la prevención es fundamental, por ese motivo desde Atención Primaria se pone especial hincapié en este colectivo.
Actualmente, según el protocolo en vigor, a todas las mujeres embarazadas de Cartagena, durante el primer trimestre de gestación, se les oferta la posibilidad de realizarse el test de detección de VIH. El número de nuevas embarazadas atendidas durante este año 2009 es de 4.656, las cifras de aceptación superan el 95 por ciento de los casos, lo que supone más de 4.500 test realizados.