Con el objeto de mejorar la calidad medioambiental en todo el término municipal, el Ayuntamiento de Cartagena está llevando a cabo la sustitución progresiva de todos los semáforos tradicionales, que funcionaban con lámparas halógenas, por señales de tráfico que emplean la tecnología denominada LED (Light Emitting Diodes o diodos luminiscentes).
Este nuevo modelo de semáforos incluye multitud de diminutas lámparas de colores que, en conjunto, generan un efecto similar al que se tenía antes con la bombilla halógena tras un reflector coloreado (verde, ámbar o rojo).
Las ventajas de esta nueva tecnología frente a la del semáforo tradicional son varias, como el hecho de que se reduce el consumo entre un 80 y un 90 por ciento, además de que tienen una vida útil de 10 años, mientras que la duración de las lámparas convencionales estaba alrededor de 6 meses.
También ofrecen una mayor seguridad puesto que emiten una luz de alto brillo y desaparece el reflector que poseen los semáforos convencionales evitando ser deslumbrados por el sol, lo que se conoce como efecto 'fantasma'. Por otro lado, al poseer mas de 100 focos de luz evita que si falla alguno se apague la señal semafórica.
En cuanto al ahorro energético e impacto ambiental, se calcula que si el consumo diario de los 5.108 semáforos tradicionales era de 8.581 Kw/día con un resultado de emisiones a la atmósfera de 3,287 toneladas de CO2, con la nueva tecnología que se está implantando pasará a 1.225,92 Kw/día con un resultado de emisiones de 0,47 toneladas de CO2.
El proyecto, tendrá una duración aproximada de unos dos meses y se realizará sin coste alguno por parte del Ayuntamiento ya que ha sido subvencionado por el I.D.A.E ( Instituto de la Diversificación y Ahorro de la Energía). La instalación va a ser realizada por la empresa MURTRAFIC.