La alcaldesa de Cartagena, Pilar Barreiro, y el secretario general de la Consejería de Presidencia de la Comunidad Autónoma, José Gabriel Ruiz, han anunciado hoy la suscripción, en los próximos días, de un convenio entre ambas administraciones por valor de 400.000 euros para dotar el nuevo cuartel de la policía local, con una dotación de 25 agentes, que cubrirá la zona oeste de Cartagena y se va a instalar en el edificio del Castillito, antigua casa de muñecas del marqués de Fuentesol, ubicado en Los Dolores.
Así lo han dado a conocer en el transcurso de la celebración de la festividad de San Leandro, patrón de la policía local, acto en el que Pilar Barreiro ha destacado la labor de los agentes que trabajan cada día al servicio de los ciudadanos y ha hecho balance de los logros de los últimos años en pro del crecimiento del número de efectivos, medios materiales y formación, gracias a la colaboración del gobierno regional.
En este último aspecto, el de la formación, la alcaldesa ha destacado la próxima construcción de la Academia de Seguridad, una escuela que impartirá cursos a los agentes y cuyas instalaciones ya se han diseñado.
De este modo, las perspectivas de mejora de la seguridad ciudadana en la región son halagüeñas, a la vista de los datos que se registran en la Comunidad Autónoma con la puesta en marcha del Plan Regional de Seguridad Ciudadana (2006-2016). A día de hoy tenemos 628 policías locales más en la región, además de 67 nuevos vehículos en la calle.
En Cartagena este aumento ha supuesto la incorporación de 50 agentes, 24 de ellos ya están en la calle y los otros 26 están en la academia y pasarán a la plantilla durante el primer trimestre de 2009.
En este sentido, el concejal de Seguridad Ciudadana, Enrique Pérez Abellán, resaltaba en su discurso en la evolución de un cuerpo que se creó en 1862, y que en los últimos veinte años ha supuesto duplicar efectivos y medios, adaptándose a los tiempos que corren.
En la actualidad hay 300 agentes que, en lo que va de año, han llevado a cabo 5.000 actuaciones y han atendido a más de 300.000 llamadas telefónicas. Estas mejoras no solo se han dado en la cantidad sino también en la calidad del servicio prestado, de manera que se ha reducido a menos de tres minutos el tiempo para atender asuntos urgentes y diez minutos para los no urgentes.