La Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE) ha remitido a la Dirección General de Calidad Ambiental un escrito pidiendo que no se autorice el dragado del entorno del Puerto deportivo de Los Urrutias y que se adopten medidas adecuadas para mejorar el estado de conservación de la laguna.
El dragado supondrá un impacto negativo para la laguna.
ANSE ha remitido un extenso escrito a la Dirección General del Calidad Ambiental pidiendo la retirada del proyecto de dragado del entorno del Puerto deportivo de Los Urrutias promovido por Dirección General de Puertos y Costas de la Comunidad Autónoma. Dicho proyecto pretende proceder al dragado de casi 3 hectáreas de la laguna extrayéndose hasta 30.000 m3 de fangos, muy probablemente contaminados por metales pesados. Esta actuación tendrá a juicio de ANSE un efecto muy negativo sobre las comunidades sumergidas de la laguna e incrementará los problemas del área sur del Mar Menor que pretenden resolverse.
La zona que se pretende dragar es conocida como saladar "Charco de la Vaca" y constituye uno de los pocos tramos del litoral de Los Urrutias-Punta Brava que se libró de las mal denominadas "regeneraciones de playas". Esas actuaciones destruyeron amplias extensiones de fondos lagunares y alteraron profundamente la dinámica litoral de la zona por la construcción de espigones. Estas obras, unidas a la ejecución de puertos deportivos y la paulatina eutrofización de las aguas, son las principales causas del estado actual de degradación de una parte significativa de las orillas del Mar Menor.
Fondos bien conservados y especies amenazadas, en una zona protegida.
Recientemente, biólogos de la Asociación han realizado prospecciones en la zona que pretende dragarse, en la que han encontrado comunindades en buen estado de conservación. Destacan las extensas praderas de las fanerógamas (plantas con flores) marinas conocidas como Cymodocea nodosa y Ruppia cirhosa. Ambas especies están consideradas como amenazadas en la Región de Murcia y se ha propuesto su protección con la categoría de Vulnerable. Estas fanerógamas conforman hábitats similares a las praderas de Posidonia oceanica del Mediterráneo o los bosques de las zonas emergidas y se trata de zonas de elevado interés ecológico (producción de biomasa, depuración del agua) y económico (alevinaje de peces comerciales). Las formaciones de fanerógamas marinas están consideradas como hábitats de interés comunitario por la Directiva 92/43/CEE.
Además, los técnicos de ANSE han encontrado ejemplares de fartet (Aphanius iberus), un pez endémico en peligro de extinción, y algunos ejemplares de los amenazados peces aguja (Syngnatus sp.), siendo la zona un hábitat adecuado para el caballito de mar (Hippocampus sp.pl.). Asimismo, en la zona se encuentran especies de elevado interés comercial como el chirrete o alevines de mújol. Toda la información científica disponible sobre la zona destaca el valor de este enclave.
La zona de dragado está sujeta a cuatros figuras de protección internacional: Lugar de Importancia Comunitaria (LIC), Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), Zona Especialmente Protegida de Interés para el Mediterráneo (ZEPIM) y humedal Ramsar.
Además, en el retazo de saladar adyacente aún se reproducen diversas aves acuáticas como la cigüeñuela ( Himantopus himantopus) y el chorlitejo patinegro (Charadrius alexandrinus).
El Mar Menor requiere soluciones, no reiterar los errores del pasado.
ANSE considera imprescindible proceder a la realización de un estudio detallado de la dinámica litoral de la zona que permita identificar cuáles son los obstáculos que han alterado la circulación de las aguas (espigones, puerto deportivo) y actuar sobre ellos, bien procediendo a su demolición o bien a su reforma. En la realización de tales actuaciones deberían coordinarse las Administraciones implicadas: Dirección General de Puertos y Costas y Dirección General del Medio Natural (Administración Autonómica) y la Demarcación de Costas en Murcia (Administración Central del Estado).
Complementariamente, es preciso adoptar medidas de limpieza rutinaria por medios manuales de la zona y sin afectar a las praderas de fanerógamas. En ningún caso resulta recomendable la ejecución de costosas actuaciones de dragado que van a empeorar la situación actual o trasladar el problema unos cientos de metros.
En definitiva, ANSE considera que la recuperación del litoral de la laguna requiere de soluciones originales que resuelvan los problemas desde su raíz y, sobre todo, no reiterar los errores del pasado.