“Una idea muy sencilla, como todos los grandes inventos”. Juan Antonio López, investigador de la Universidad Politécnica de Cartagena, define así el uso de velas para orientar boyas que ha patentado la UPCT. “Consiste en utilizar la aerodinámica como fuerza motriz para establecer la orientación de la boya que se desee”, explica Roque Torres, compañero de Riquelme en el grupo de investigación DSIE (División de Sistemas e Ingeniería Electrónica) y director del Proyecto Fin de Carrera de la alumna Cintia María Golpe durante el que se desarrolló y testó esta innovación, cuya patente internacional fue publicada el pasado mes de marzo.
La orientación de la boya sirve para optimizar los recursos energéticos, pues permite redirigir hacia el Sol, en función de la hora, las placas solares con las que se alimenta el sistema eléctrico de la boya. También puede utilizarse para fijar la perspectiva de una cámara de videovigilancia. La idea parte de que “las velas tienden a ejercer la mínima resistencia respecto al viento”, cuenta Torres, así que mediante un sistema de control, unos sensores y un software, se gestiona un pequeño motor acoplado a una vela, que a su vez obliga a la boya a orientarse hacia donde interese. “La vela ejerce de bastidor de la boya”, resume Riquelme. El presupuesto total del sistema, incluyendo la vela, el motor y los sensores, es de 50 euros. “No encarece la boya, porque permitiría reducir el tamaño de la placa solar”, añade Torres.
Además de Roque Torres y Juan Antonio López, varios investigadores de DSIE, como Pencho Soto, llevan años perfeccionando boyas para monitorización costera, con las que han medido diversos parámetros de la hidrodinámica del Mar Menor, y para controlar la calidad y volúmen del agua en embalses de riego. Las boyas están telecomunicadas entre sí y a una estación base que recoge los datos. Estos desarrollos implicaron también a alumnos que hicieron sus tesis doctorales o proyectos, como Cristina Albaladejo y Honorio Navarro, que junto con los anteriormente citados, fundaron la empresa Widhoc Smart Solutions, una spin-off de la UPCT que ganó el premio regional Emprendedor XXI de La Caixa y que tiene cedida la explotación comercial de la nueva patente.
Cintia María Golpe, la estudiante que trabajó en el desarrollo de la idea patentada, describe como “una satisfacción ver que sirve de algo y tiene utilidad práctica lo que has estudiado”. Su director de PFC, Roque Torres, afirma que “los alumnos tienen mucho potencial y están deseando participar en proyectos que conviertan en realidad sus conocimientos teóricos”. Otro estudiante está realizando un Proyecto Final de Carrera para medir el rendimiento energético de las placas solares instaladas en boyas orientables. Los investigadores estiman que serán un 30% más eficientes.