La historia del cartagenero David Vero es análoga a la de otros muchos ciudadanos. La empresa para la que trabajaba quebró en abril de 2012 como consecuencia de la crisis y, ante la incertidumbre laboral, decidió embarcarse en la puesta en marcha de su propio negocio, un taller de mecánica rápida.
Así, en el verano de ese mismo año, en concreto el 3 de agosto, vio la luz La Pole, nombre elegido por su mujer como él mismo confiesa, ya que ambos comparten la afición por el automovilismo y el motociclismo, y que se encuentra ubicado en el bajo n°9 de la calle Picos de Europa de la urbanización Nueva Cartagena.
David tiene palabras de agradecimiento para su familia y allegados, ya que si los primeros le han ayudado en el plano económico, el local que tiene en alquiler es de uno de sus amigos. Asimismo, también pone de relieve el papel que ha jugado la Agencia de Desarrollo Local y Empleo de Cartagena (ADLE).
Además de recibir unas pautas de seguimiento necesarias para abrir La Pole, según sus palabras, le han asesorado en lo que respecta a la formalización administrativa y fiscal.
Con humildad, reconoce que en Cartagena hay grandes profesionales y muy buenos talleres de mecánica. Sin embargo, sus bazas frente a la competencia son el trato directo y la rapidez. Yo quería un taller familiar, en el que el cliente confíe en mí, aunque es normal que se consulten segundas opiniones, subraya entre risas.
Comenzó muy joven en este sector, continuando con la tradición familiar. Ahora está al frente de este pequeño negocio en el que se pueden solicitar presupuestos sin compromiso como reza en una de sus paredes. Entre sus servicios, los relacionados con las correas de distribución, embragues o cambios de aceite, por citar algunas de sus prestaciones. En lo referente a las grandes reparaciones, trabaja con otros talleres. Y es que, aquí en Cartagena nos conocemos todos.
La crisis le llevó a emprender, pero también a ajustar los precios. Necesitas un elevado volumen de clientes para que esto funcione, afirma David, si bien ya cuenta con una media de 50 clientes al mes que confían en sus manos. Entre sus promociones, citar por ejemplo, un cambio de aceite por 50 euros.
La Pole abre de lunes a viernes en horario de 08,30 a 14,00 y de 16,00 a 20,30 horas, mientras que los sábados sólo trabaja en horario de mañana.
