La alcaldesa, Pilar Barreiro, y el concejal de Atención Social, Antonio Calderón, han dado hoy la tradicional bienvenida a los 41 niños saharauis que van a pasar el verano en nuestra ciudad con familias cartageneras.
Para no cansar a los pequeños, la alcaldesa se ha saltado el discurso y ha pasado directamente a entregarles a cada uno de ellos un regalo en recuerdo de su visita a Cartagena y desearles un feliz verano.
Los chavales, que llegaron el miércoles, vienen procedentes de los campamentos de refugiados de Tinduf y durante su estancia, tendrán la oportunidad de perfeccionar el español y descubrir el mar, la naturaleza y los productos de estos dos importantes ecosistemas, siendo los mejores embajadores de su pueblo y creando un sentimiento de solidaridad hacia su causa.
El objetivo de este programa es alejar a estos niños y niñas de las duras condiciones de exilio en la zona del desierto donde, en verano, se alcanzan temperaturas superiores a los 50°, al mismo tiempo que recibirán una alimentación integral y equilibrada, se les realizan revisiones médicas, disfrutan de actividades de convivencia y, lo más importante, convivirán en el seno de una familia cartagenera de acogida como uno más.
Este año vienen a la Región de Murcia un total de 141 niños, de los cuales un tercio se queda en la ciudad de Cartagena, gracias a la solidaridad de las familias del municipio.
En este proyecto colabora la Asociación de Vacaciones de Paz, las Asociaciones Solidarias con el Pueblo Saharaui, la Dirección General de Política Social y el Servicio Murciano de Salud de la Comunidad Autónoma de Murcia, y municipios como el de Cartagena.