El Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia (TSJ) tendrá que volver a pronunciarse sobre la legalidad del proyecto de demolición de una manzana de edificios para la apertura de una plaza frente a la Iglesia de la Caridad, contemplada en el Plan Especial de Ordenación y Protección del Casco Histórico de Cartagena. Así lo ha determinado una sentencia del Tribunal Supremo como respuesta a un recurso de casación interpuesto por propietarios de las viviendas afectadas, a los que el TSJ no había dado la razón inicialmente.
Según ha explicado el concejal de Urbanismo, Joaquín Segado, el Supremo ha rechazado uno de los dos argumentos utilizados por el TSJ en su sentencia, al considerar que con el derribo se alteraría la trama urbana actualmente protegida, y retrotrae las actuaciones para que el TSJ vuelva a dictar una nueva sentencia, que puede ser favorable o no al Ayuntamiento según Segado, utilizando otras argumentaciones expuestas por las partes en el proceso y conforme a las leyes de patrimonio.
Segado ha añadido que el Ayuntamiento acata esta sentencia y que no tendrá efectos inmediatos, ya que no se había llevado a cabo ninguna actuación para la creación de esta plaza, ni tampoco era una cuestión prioritaria.
En estos momentos, dada la situación económica era un asunto relativamente aparcado, ha dicho Segado. Si el TSJ dice finalmente que sí, se hará y si no, no pasará nada, ha concluido el concejal.