Marfil Santa Coloma será este viernes, a las nueve y cuarto de la noche, el equipo que se medirá a Reale Cartagena en un encuentro vital para los albiazules. El apoyo de la afición debe ser fundamental para tratar de, entre todos, derrotar a un complicado Marfil.
Los de Sergio Mullor han sumado siete de los últimos doce puntos gracias a las dos victorias logradas ante OID Talavera y Caja Segovia, un empate con Fisiomedia Manacor y caer únicamente derrotado en Puertollano. Las prestaciones de Marfil a nivel ofensivo han mejorado con los dos fichajes del mercado de invierno, Jhow y Hugo, que le han dado otro aire al equipo colomense.
El cuadro catalán mantiene de esta forma la diferencia con respecto a la promoción de descenso y toma oxígeno en la parte baja de la tabla al ponerse decimosegundo con veintiún puntos. "Ellos nos están marcando el camino que debemos seguir, el de ser fuertes en casa", explicaba David Marín esta misma mañana en rueda de prensa, a la vez que añadía: "como visitante no lo está haciendo excesivamente bien, cosa que da igual porque tampoco van a venir aquí a dejarse ganar. Para ellos este partido supone la oportunidad de salvarse y para nosotros es una necesidad".
Al Reale Cartagena sólo le vale ganar. Tras la jornada tan negativa de la semana pasada el conjunto cartagenero se encuentra a siete puntos de la salvación: "podemos ser optimistas dentro de la gravedad de nuestra situación, pero insisto, hasta que no hagamos tres puntos en casa, no tendremos esa estabilidad", manifestaba el director deportivo del Reale. A falta de ocho jornadas y veinticuatro puntos por disputarse, Marín no firmaría la promoción de ascenso: "ahora mismo podemos pensar en más".
El madrileño exteriorizaba que "la derrota en los últimos minutos ante Talavera fue muy dura, pues pudimos habernos llevado incluso los tres puntos". David Marín aseguraba que "deportivamente el equipo tiene argumentos para salir de ahí, pero tiene que jugar tranquilo. Necesitamos la victoria balsámica que nos haga ver las cosas de manera más optimista". En palabras de Marín: "la mayor dificultad de este proyecto es que nos lo jugamos todo cada semana y hay que controlar esas emociones. El partido está más en nuestra cabeza que en la cancha estrictamente".
La afición albiazul será clave: "ha llevado al equipo en volandas en muchas ocasiones y de eso se trata, de llenar la Bombonera. Gradas repletas, que la gente este a muerte con el equipo y que demos nuestra mejor versión". El conjunto cartagenero sólo sufre una baja de última hora, la del guardameta Álex, que aquejado de problemas musculares sale de la convocatoria para ceder su puesto al meta del filial, Isi.