La Comunidad Autónoma concedió 134.780 euros durante el período 2007-2010 a la Fundación Tienda-Asilo San Pedro, de Cartagena, para los proyectos Torre Nazaret y Centro de Formación Profesional Ocupacional. El primero de ellos está dirigido a enfermos terminales de sida y el segundo a jóvenes desempleados del barrio cartagenero de Lo Campano en situación de exclusión social.
La semana pasada, el director general de Pensiones, Valoración y Programas de Inclusión Social, Juan Castaño, visitó las instalaciones de la Fundación, donde se llevan a cabo ambos proyectos.
El Hogar Torre de Nazaret es una residencia en la que se ofrece alojamiento y se cubren las necesidades básicas de personas enfermas de sida que no cuentan con otros recursos externos para su atención y que llegan al centro con un grave deterioro personal y físico. Allí se les asiste con los recursos personales y materiales adecuados para la atención de este colectivo, que no dispone de otra institución de estas características en la Región.
A partir de su ingreso y tratamiento, se ofertan actividades que propicien la incorporación social de estas personas. El ámbito geográfico de actuación se amplía a toda la Región de Murcia, aunque la ubicación sea en la comarca de Cartagena.
Asimismo, el segundo proyecto, desarrollado a través del Centro de Formación Profesional Ocupacional, comprende distintas actuaciones, como el desarrollo de un programa de innovación tecnológica y otro de orientación psicosocial e inserción profesional dirigido a personas que se encuentran en barrios marginales y están en situación de exclusión social.
Ambos programas se sustentan en la contratación de profesionales para intervenir con los alumnos participantes en los cursos o talleres de formación profesional. Las materias impartidas son soldadura y electricidad, y todo lo que tenga que ver con manufacturar el metal.
Igualmente, se ofrece orientación laboral, asistencia social y de apoyo a los participantes en los distintos cursos a través de intervención tanto individual como grupal. El pasado año, sesenta usuarios participaron en las acciones formativas.