Los operarios que se encargan de construir el Auditorio y Palacio de Congresos ubicado en el Puerto, han comenzado a colocar los tubos de policarbonato de varios colores que recubren el edificio en la zona de la gran sala.
Los tubos, que revestirán una superficie de 1.570 metros cuadrados, suman 31.086 metros lineales, son de distintos colores y del mismo formato que las piezas que formarán 700 metros cuadrados de pérgolas en las terrazas del edificio. Estos tubos, elaborados en varios colores, suman 45 kilómetros lineales.
Todo el edificio tiene una piel de plásticos de alta tecnología, según recuerda José Vicente Albaladejo, concejal de Infraestructuras, para quien el tratamiento de las fachadas diseñado por Selgas y Cano va a ser una de las claves del éxito de un edificio que ya es una referencia en la arquitectura nacional. Los arquitectos han sabido utilizar las enormes ventajas que los plásticos del última generación aportan para construir edificios luminosos, como empiezan a hacerse en la arquitectura más vanguardista y eso convierte nuestro Auditorio en un edificio estudiado por especialistas de todo el mundo, según Albaladejo.
Esa piel de plástico tecnológico se ha elaborado a partir de 60 toneladas de plástico producidos en la planta de Sabic en Cartagena y procesados en una industria de Milán en la que se elaboraron los copolímeros termo plásticos que recubren la fachada.
La parte traslúcida exterior está realizada a base de 2.155 metros cuadrados de lamas de poli metacrilato y otros 2.765 metros en el revestimiento interior. En la unión entre la zona de la gran sala y el resto del edificio se han instalado dos cerramientos divisorios de ETF.
Este plástico de alta tecnología es una alternativa al vidrio utilizado en algunas construcciones emblemáticas, como el Cubo de Agua de los Juegos Olímpicos de Pekín. Es 100 veces más ligero que el vidrio, más aislante y enormemente resistente a los rayos ultravioleta. Estos cerramientos, de color naranja, tienen 338 metros cuadrados y sus grandes dimensiones hicieron necesario para su instalación el concurso de tres grúas.