El festival poético Deslinde se ha consolidado en tan sólo dos ediciones como una cita ineludible para los amantes de la poesía en nuestro país. La Concejalía de Cultura ha hecho un balance de la recién terminada segunda edición que no puede ser más satisfactorio.
El concejal de Cultura, David Martínez Noguera, ha asegurado que “la mayoría de los actos programados en Deslinde han contado con una afluencia de público masiva, lo que evidencia que existe un espacio público de interés para programar actividad poética, que además es el único acontecimiento de este tipo en toda la Región”.
Este año, el festival -que ha contado con casi un centenar de participantes en su programa- ha tenido una dimensión internacional, ya que ha contado con la reconocida poeta rumana Ana Blandiana, el poeta y repentizador cubano Alexis Díaz Pimienta, o del poeta sirio Yaafar Al Aluni. Esto también ha ayudado a hacer de Deslinde un festival intercultural y de la diversidad, en cuyo programa culturas diferentes han encontrado su espacio.
También han sido destacados los actos con poetas españoles de amplio conocimiento como han sido Luis García Montero o Raquel Lanseros, que tienen muchos fieles seguidores de sus creaciones.
La vertiente regional ha sido nutrida, con poetas de muy distintas generaciones, desde el mayor de todos, el homenajeado Francisco Sánchez Bautista, a los más jóvenes, con una representación de las nuevas generaciones de poetas de alrededor de la veintena, mostrando con ello un deliberado perfil intergeneracional.
También ha sido un festival que ha preservado la igualdad de género en su programa, con un equilibrio entre hombres y mujeres (ningún género ha estado representado por debajo del 40%), otra seña de identidad de la que presume Deslinde.
Además, Deslinde ha querido explorar ámbitos diferenciados de la vida social, llevando actividades a los barrios populares, como José María Lapuerta, ya que fue muy emocionante y participativo el acto de Luis García Montero en la Botica del Libro; o a centros educativos con tres actos sobre Miguel Hernández realizados en diferentes institutos del municipio, y ofreciendo directamente a alumnos y profesores la oportunidad de organizar actos en el programa del festival, como el homenaje al bimilenario del poeta Ovidio desde el IES Jiménez de la Espada. También hay que inscribir en este sentido el acto con internos de la prisión de Campos del Río.
La música y otros lenguajes creativos -muy especialmente el cine y el audiovisual- con la que ha interactuado la poesía han estado muy presentes también en diferentes conciertos e intervenciones, con amplio seguimiento de público.
Por otra parte, desde el punto de vista espacial, el festival ha ocupado todo tipo de escenarios para sus propuestas, lo que también forma ya parte de la marca Deslinde: desde las ruinas clásicas a los bares, desde los museos a las plazas, desde bibliotecas a librerías, pasando por centros educativos, salones oficiales o edificios del patrimonio cultural.
Por último, ha encontrado un tratamiento especial el Premio Internacional de Poesía Antonio Oliver Belmás, que convoca la Universidad Popular de Cartagena, en torno al cual nació Deslinde.
En esta edición, la UP ha editado una antología de los treinta años ya cumplidos de este prestigioso galardón, con una muestra de todos los ganadores, que se presentó tanto en Madrid como en Cartagena, y que contó con la asistencia de muchos de los poetas que han obtenido este premio, suponiendo el fallo de la edición del presente año el cierre de un Deslinde que ha crecido hasta hacerse mayor -un sólido festival poético del mayor nivel- en tan sólo dos años.