Los representante del colectivo GALACTYCO, Daniel Guirao y Alberto Alba, acompañados por el concejal de Igualdad en funciones, David Martínez, el concejal de Desarrollo Sostenible en funciones, José López, y las miembros de la Corporación Municipal, Teresa Sánchez y Pilar Marcos, han comparecido esta mañana para condenar las agresiones producidas el pasado sábado 17 de junio en el desfile del Orgullo LGTBIQ de Murcia de un grupo de ultraderecha contra las personas que participaban en el desfile, y para pedir la dimisión del delegado del Gobierno en la Región de Murcia, Antonio Sánchez-Solís.
Guirao ha leído algunos de los titulares de prensa a los que dio lugar la agresión del sábado a modo de enunciado de una hecho que "no es sorprendente", ha indicado, debido a la aprobación el mismo día y a la misma hora de una manifestación del grupo de ultraderecha 'Lo Nuestro', “sabiendo perfectamente que era una provocación contra la manifestación del orgullo de Murcia”. Es por ello que ha señalado a Sánchez-Solis como culpable de permitir una situación que podía dar lugar a la alteración del orden público con peligro para personas y bienes, como finalmente se produjo.
A continuación ha comparecido Alba, que asistió a la manifestación del Orgullo LGTBIQ de Murcia, que ha explicado como un grupo de 10 a 15 personas cogieron una de las vallas que delimitaban el recorrido de la manifestación del orgullo, y se lanzaron con ella alzada y enarbolando banderas de España contra una de las carrozas. Efectivos de la policía detuvieron la primera carga, “sin embargo no pudieron frenar las agresiones que se produjeron a nueve personas”, ha relatado, y ha condenado el hecho de que el delegado del Gobierno sólo reconozca que existió una de las agresiones a un fotógrafo, porque fue denunciada, y niegue las demás.
A continuación ha leído el manifiesto del colectivo GALACTYCO, por el que condenan “rotundamente” las agresiones a manifestantes durante la celebración del Orgullo en Murcia. En él se exige la dimisión de Antonio Sánchez-Solis por permitir la convocatoria de la manifestación del grupo ultraderechista 'Lo Nuestro', “sabiendo que era más que probable que surgieran enfrentamientos y provocación por parte de este grupo” a los participantes de una manifestación “pacífica” que reivindicaba “ el respeto, la diversidad, la igualdad y la libertad”.