El detenido surtía de sustancias estupefacientes a los "garitos" ubicados en distintas poblaciones del Mar Menor para su venta al menudeo.
El jefe de la organización se abastecía de la droga de traficantes colombianos, por lo que la sustancia intervenida era de gran pureza.
La organización estaba formada por hermanas, cuñados, esposas y otros miembros inferiores encargados de la distribución.
La Policía Nacional ha logrado la desarticulación de una organización criminal de carácter familiar, asentada en La Manga, que se había convertido en la mayor red de distribución de drogas en las poblaciones del Mar Menor y alrededores.
Las investigaciones se iniciaron el pasado mes de noviembre de 2015, cuando se tuvo conocimiento de las actividades delictivas de un individuo vinculado al tráfico de drogas en Cartagena.
Los investigadores pudieron constatar que esta persona, se habría trasladado a la zona de La Manga, dada la presión policial en Cartagena, para comenzar sus acciones criminales de venta de estupefacientes.
Del mismo modo, se pudo averiguar que el cabecilla, conocido como "el cebollo", muy conocido en aquella zona de veraneo, pues hacía ostentación de riqueza además de no ocultar su verdadera actividad delictiva, había incluido en su organización; a su esposa, su hermana, su cuñado, además de algunos amigos más allegados, que ocuparían distintos eslabones secundarios en la estructura criminal.
De este modo, controlaría fielmente, a todos los miembros de su grupo, evitando traiciones o enfrentamientos, esto es coloquialmente "todo queda en casa".
Los agentes del Grupo de Estupefacientes de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía en Cartagena, comprobaron como "el cebollo" adquiría la droga directamente de traficantes colombianos asentados en otras provincias españolas, distribuyéndola posteriormente en cantidades que oscilaban entre los cien gramos y el kilo, entre los pequeños "camellos" de las poblaciones próximas al Mar Menor.
Con toda la información perfectamente estructurada y con los indicios necesarios, se solicitaron los preceptivos mandamientos judiciales, para las entradas y registros de los domicilios de los traficantes.
De este modo y con el apoyo de más de cien efectivos policiales de las Brigadas de Seguridad Ciudadana de la Jefatura Superior de la Región de Murcia y de la Comisaría de Cartagena y guías caninos, además de la Brigada Local de Policía Científica de Cartagena, los agentes del Grupo de Estupefacientes, irrumpieron en los domicilios, no sin antes proceder a la detención del cabecilla cuando se disponía a realizar un "pase" de 150 gramos de cocaína en un conocido restaurante de la zona.
Fruto de los registros se intervinieron:
CUATRO MIL DOSCIENTOS (4.200) GRAMOS DE COCAÍNA.
TRES MIL QUINIENTOS (3.500) GRAMOS DE HACHÍS.
DOSCIENTOS (200) GRAMOS DE METANFETAMINA (CRISTAL).
SESENTA (60) PASTILLAS DE MDMA (ÉXTASIS).
TRESCIENTAS (300) DOSIS DE LSD.
CIEN (100) GRAMOS DE MARIHUANA.
TRES REVOLVERES DE CALIBRES 22 LR, .38 SPECIAL,.357 MAGNUN.
UNOS MIL QUINIENTOS (1500) CARTUCHOS DE DISTINTOS CALIBRES (.38 SPL, 22LR, .45 ACP….ETC).
UNA PRENSA.
MOLDES PARA LA ADULTERACIÓN DE COCAÍNA.
QUINIENTOS (500) GRAMOS DE "MANITOL" (CORTE).
CINCO MIL (5.000) EUROS EN METÁLICO.
OCHO (8) VEHÍCULOS.
DIVERSOS EFECTOS RELACIONADOS CON EL PROCESO DE ADULTERACIÓN DE LA COCAÍNA Y CON EL TRÁFICO FINAL DE DROGA.
Finalmente la operación policial se saldó con siete detenidos, unos de ellos puesto en libertad, y un total de ocho registros domiciliarios, con sus correspondientes trasteros y garajes, ubicados en las poblaciones de La Manga, Playa Honda, Cala Flores, El Algar, y Los Belones.
Los detenidos serán puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número Uno de San Javier.