Todas y todos hemos visto, oído o leído las pretensiones del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones sobre "acercar la edad real de jubilación a la edad legal", es decir, aumentar la edad media a la que la gente tiene que jubilarse, en la mayoría de casos por necesidad, mediante el endurecimiento de los requisitos para acceder a la anticipada, aparte de 'incentivar' el envejecimiento activo entre un 4 y un 5% más. Posteriormente, en diversas entrevistas, ha distinguido entre jubilación anticipada voluntaria (JAV) e involuntaria (JAI), señalando a la primera como la única que se vería afectada por esta medida.
El endurecimiento de las reducciones de pensión es un nuevo apretón de tuerca a l@s más desfavorecid@s que iría por el lado de aplicar la reducción por trimestre anticipado al importe de la pensión (recordemos, entre 1,625% y 2% por trimestre, ¡hasta un 32% de reducción de la pensión para siempre!), en lugar de a la base reguladora como hasta ahora, lo que "afectaría fundamentalmente a las pensiones más altas y máximas, las más beneficiadas con el sistema de reducción actual" pero también lo haría, en menor medida pero lo haría, a las pensiones bajas o muy bajas.
De no corregir la situación actual y no precisamente en el sentido que quiere Escrivá, l@s parad@s de 50 o más años que ya no encuentran otro trabajo estarán condenados a malvivir con el subsidio de 430 €/mes durante demasiados años, desde los 52 a los 67 a partir de 2027, 15 años, o bien aceptar una Jubilación Anticipada por necesidad desde los 63 con fuertes reducciones de pensión de forma vitalicia, entre un 26 y un 32%. Y quieren reducirles la pensión aún más a quienes tienen trabajos duros, a los que quieren adelantar su jubilación porque difícilmente llegarán a los 67 años en condiciones, y aumentarla a quienes tienen trabajos que les permiten alargar su carrera laboral sin problemas de salud más allá de esa edad. Hay oficios en los que debiera instaurarse como norma la jubilación anticipada sin reducción como existe ya para determinadas profesiones (policía, bomberos, etc), y otros en los que no hay problemas por atrasar la jubilación, porque no es el mismo estado físico en que se llega a la jubilación a los 67 dependiendo del trabajo desarrollado. Aquí siempre utilizo el ejemplo de una limpiadora de Universidad y un catedrático de la misma Universidad, para explicar las grandes diferencias entre unos trabajos y otros, incluso dentro de la misma empresa.
En todo caso resulta contraproducente una medida como ésta, e incluso una jubilación ordinaria más allá de los 65 años si tenemos en cuenta el enorme desempleo juvenil que azota España. Y que no nos intenten "liar" los vendedores de pensiones privadas con que "no es exactamente así": cuando hay un hueco laboral hay una oportunidad de trabajo para un/a joven.
Pero hay otro problema añadido: la Jubilación anticipada con 40 o más años cotizados. El ministro dice que "está abierto a estudiar" la propuesta que haga la Comisión del Pacto de Toledo respecto de reducir las deducciones para las jubilaciones anticipadas para personas con largas carreras de cotización.
Las plataformas de pensionistas siempre hemos reclamado esta medida de clara justicia social: si la SS exige un mínimo de años de cotización para la jubilación con el 100% de pensión, es lógico que por encima de esos años de cotización se consiga el 100% antes de la edad "legal", y lo vemos claro con una simplísima fórmula matemática: si con 38,5 años cotizados podrás jubilarte a los 65 con el 100% de la pensión, aplicando 38,5+65= 103,5 ( con 40 años cotizados+63,5 años de edad=103,5, el mismo "número de referencia", y así consecutivamente: 41cot+62,5edad=103,5… sencillo ¿verdad?
No obstante, la contestación del ministro no nos dice nada nuevo ni se compromete realmente, deja pasar la ocasión de indicar una línea a seguir por lo que nos tememos poca o ninguna implicación por su parte.
Ojalá nos equivoquemos en todo. Nos llevaríamos una gratísima sorpresa.