Fotos: Luis Godínez y agencias
Una año más, la Asociación Benéfica Cartagena por la Caridad ha llevado a cabo la iniciativa 'Alimentando corazones', un proyecto internacional mediante el que se ha entregado comida en las fechas navideñas a países del tercer mundo bajo el lema “Socorrer a los más pobres de entre los pobres”.
Según explica el presidente de la asociación, Matías Barco, «la iniciativa, surgida en el 2018 y que se enmarca en nuestra campaña navideña, va aumentando año en año, ampliándose el número de beneficiarios de la misma. De hecho, en esta edición hemos llegado hasta 1.300 personas necesitadas».
'Alimentando corazones' ha llevado almuerzos comunitarios con pollada, pavo, chocolate con panetones y regalos a las poblaciones peruanas de Huaraz, Cutervo, Orellana – esta última ubicada en la selva - y, también, a Lima, para estar al lado de las Hermanitas de los Pobres asentadas en la capital de Perú.
Asimismo, ha proporcionado alimentos durante varios días a 250 personas indigentes que viven en las calles de la ciudad cubana de Santa Clara y ha atendido a otras 250 en Carúpano (Venezuela), personas residentes de un centro geriátrico y a las personas ingresadas en los servicios de medicina general e infantil del hospital de aquella localidad.
Igualmente, en tres distritos de la ciudad argentina de Córdoba se han repartido 600 cajas navideñas con productos de primera necesidad y con la colaboración de la Fundación 'Las Moreras'.
Del mismo modo, tampoco se ha dejado desatendidos a los necesitados de la Región de Murcia. Por ello, y tal y como viene ocurriendo en años anteriores, se ha colaborado con la Fuerza de Guerra Naval Especial mediante su campaña 'Tonelada Solidaria' mediante la que los militares han caminado desde la Cartagena hasta Caravaca de la Cruz donando kilos de alimentos no perecederos a las delegaciones de Cáritas en la Comarca del Noroeste y a otras organizaciones sociales.
Y, como no podía ser menos, 'Alimentando corazones' ha colaborado con el proyecto 'Gota de Leche' que llevan a cabo las voluntarias de la Asociación Internacional de Caridad San Vicente de Paul (A.I.C.), la Hospitalidad Santa Teresa, el Santo y Real Hospital de la Caridad y las Hermanitas de los Pobres, mediante el cual han llevado alimentos 'puerta a puerta' a 100 familias cartageneras con bajos recursos económicos.
«El nombre de Cartagena se ha puesto en boca de cientos de hermanos cuyas únicas palabras al conocer desde donde procedía la caridad eran 'gracias' y 'bendiciones' para todas las personas y patrocinadores que, con sus donativos, han hecho posible que lleguemos tan lejos y a tantas personas necesitadas».
«Todo ha estado muy bien organizado. Se han cumplido con creces los proyectos planificados gracias a nuestros equipos humanos situados en esos lugares y compuestos por sacerdotes, médicos y voluntarios que no siempre lo tienen fácil para trabajar sobre el terreno», afirma satisfecho Barco.