La Medalla de Oro de Cartagena, una de las más altas distinciones que otorga la ciudad, ya luce en forma de corbatín en el estandarte del Grupo Folclórico Ciudad de Cartagena de La Palma, tras el multitudinario acto de entrega celebrado este sábado en la plaza del Ayuntamiento a las puertas del Palacio Consistorial.
Una distinción más que merecida en reconocimiento a la labor desarrollada a lo largo de sus 50 años de existencia, para la recuperación y preservación de los bailes, costumbres y tradiciones del campo de Cartagena.
Presidido por la alcaldesa, Noelia Arroyo, el acto ha contado con la presencia de los tenientes de alcalde, Diego Ortega y Diego Salinas, los portavoces municipales, Jesús Giménez y Manuel Torres, además de la concejala María Antonia Pérez, instructora del expediente de honores y distinciones que fue aprobado por unanimidad del pleno el pasado 31 de enero, y otros ediles de la corporación municipal, junto a una amplia representación de la sociedad y la cultura cartagenera.
En sus palabras, Noelia Arroyo ha desatacado la importancia de honrar con la Medalla de Oro de la Ciudad de Cartagena a “un grupo que ha llevado el nombre y el alma del municipio a lo más alto, tanto a nivel nacional como internacional”, y que más allá de un conjunto de artistas, son “un símbolo de nuestra identidad y un guardián de nuestras tradiciones”.
La alcaldesa, que no ha querido olvidar la labor de investigación del Grupo folclórico para “rescatar del olvido elementos claves de nuestra cultura musical, social, gastronómica y costumbrista” así como su capacidad para “combinar la tradición con la innovación, manteniendo vivos nuestros bailes y canciones, pero también adaptándolos y enriqueciéndolos con nuevas influencias”, cerraba su discurso agradeciendo su labor con unos versos que resumían el significado de esta Medalla de Oro, el amor de toda una ciudad.
El encargado de recoger la distinción ha sido el presidente del Grupo Folclórico, Pedro Gómez, quién ha mostrado su agradecimiento a quienes han hecho posible su camino hasta aquí y el orgullo de representar a la ciudad y a todos los cartageneros. Y a todos ellos han dedicado sus bailes tradicionales del campo de Cartagena, actuación con la que se cerraba el acto.