Esta mañana, el portavoz adjunto de MC Cartagena, Jesús Giménez, se ha desplazado hasta la sede de Lhicarsa para comprobar, de primera mano, el oscurantismo y la censura impuesta sobre la gestión y pormenores de este contrato, siguiendo las directrices, claro está, de la regidora del PP, N. Arroyo, tal y como lo refrenda el Tribunal de Cuentas.
El objetivo del edil era visitar las instalaciones que son sede de la empresa desde hace más de un año. Sin embargo, Giménez se ha encontrado con la negativa de un encargado de Lhicarsa, quien ha vetado su entrada.
Al hilo de esta situación se ha pronunciado el también presidente de MC.
"Hace un año, Lhicarsa se vio forzada a trasladarse a una nueva nave tras destapar nuestra fiscalización la utilización de medios públicos para intereses privados", ha comenzado contextualizando.
Al objeto de justificar el motivo de la visita, ha reseñado que "después de un año, no hemos parado de recibir avisos sobre la insalubridad y la falta general de condiciones de trabajo en las nuevas instalaciones cerca de Cabezo Beaza, por lo que hemos querido visitarlas".
Vetados porque Arroyo quiere 'inaugurarlas'
La razón del veto no deja lugar a dudas. "El encargado de turno nos ha indicado amablemente que no consideraba adecuado mostrarnos el lugar porque N. Arroyo quiere inaugurar las instalaciones".
Giménez, posteriormente, ha manifestado que "no nos sorprende tanto que quieran montar un sarao a pesar de los problemas como, que un año después, la alcaldesa del PP no se haya hecho esta foto".
El dirigente cartagenerista ha afirmado, también, que "valoramos denunciar ante la inspección de trabajo, aunque se nos ha dicho que los problemas de salubridad se han solucionado esta semana".
El desamparo a los trabajadores
En este contexto, ha lamentado que "bastante tienen los trabajadores a los que la empresa 'alecciona' con despidos, como para soportar este desamparo porque La Trinca prefiera mirar hacia otro lado".
Para concluir, el portavoz adjunto de MC Cartagena ha remarcado que "bien haría Arroyo en explicar antes de hacerse las fotos si la nave cumple la normativa de accesibilidad, higiénica y urbanística, pues los coches aparcados en los márgenes de la carretera son impropios de un servicio municipal y un aparente depósito de gasoil junto a las viviendas nos genera serias dudas, entre otras cuestiones detectables 'a simple vista'".