El pleno de la corporación municipal, reunido este martes 28 de diciembre en sesión urgente y extraordinaria, y de manera semipresencial debido a la incidencia del Covid, ha dado su aprobación definitiva a las nuevas Ordenanzas Fiscales de Impuestos, Tasas y Precios públicos del Ayuntamiento de Cartagena para el ejercicio 2022.
La propuesta, a cargo de la concejal de Hacienda, Esperanza Nieto, ha contado con los votos a favor de los ediles que forman parte del gobierno municipal, y en contra de MC Cartagena, Unidas Podemos IU Equo, grupo Mixto y el concejal no adscrito Gonzalo Abad.
Por otro lado, la alegación a estas ordenanzas presentada por la Coordinadora de El Molinete, ha sido desestimada, pese a contar con el apoyo de los grupos de la oposición.
Hay que recordar que las nuevas ordenanzas fiscales supondrán la congelación de tasas y precios públicos, más ayudas para las familias y para la generación de empleo y vivienda.
Tal y como ha explicado tras el pleno la alcaldesa, Noelia Arroyo, “el año que viene se bajan impuestos a las familias, se reducen para la creación de vivienda en los solares del casco histórico, y se vuelven a eliminar a los autónomos y emprendedores que abran una empresa en Cartagena”.
Para empezar, se congelan tasas y precios públicos, de manera que no se va a aplicar la subida del 4% del IPC que aplicarán otras administraciones.
Además, añadía Arroyo, “por segundo año consecutivo ningún emprendedor pagará al ayuntamiento por abrir una pequeña y mediana empresa en Cartagena, por abrir un comercio o por traspasar un negocio”.
También se aumenta en un 15% el número de familias numerosas con derecho a una reducción de hasta el 90 % en el Impuesto de Bienes Inmuebles a las familias numerosas, y se reduce un 90% el IBI a los propietarios que alquilen sus viviendas a través del ayuntamiento o de ONGs para ampliar el parque de viviendas sociales en Cartagena.
Durante todo el año, bajará el 90% el Impuesto de Construcciones en el Casco Histórico, “una medida que vamos a mantener activa de manera extraordinaria solo durante el año”, señalaba la alcaldesa, “ya que en 2023 se aplicará la legislación sobre solares para sacar a subasta las parcelas sobre las que no se haya solicitado licencia, queremos mas vivienda y menos solares en el casco histórico”.
Para finalizar, Noelia Arroyo ha hecho hincapié en que, por un lado se va a eximir de impuestos a la rehabilitación a cualquier edificio protegido, sea cual sea su grado de protección, de manera que tendrán una exención máxima del 95% que, hasta ahora, solo se aplicaba a los declarados BIC. Y, por otro lado, “también queremos ayudar a la rehabilitación de barrios con problemas de vivienda y de envejecimiento de inmuebles y por eso mantenemos la subida del 50% en la bonificación del ICIO que decidimos en esta legislatura para los barrios de Lo Campano, Los Mateos, Santa Lucía, Villalba, Virgen de la Caridad y San Antón”.