Servicios Sociales contará este año con más de 17 millones de euros para hacer frente a las graves consecuencias de la crisis sanitaria actual, según han anunciado esta mañana la alcaldesa, Ana Belén Castejón, y la concejala de Hacienda, Esperanza Nieto, tras la junta de portavoces extraordinaria en la que han entregado a los grupos de la oposición el borrador del Presupuesto Municipal para 2020, algo que no se había hecho nunca hasta ahora. Entre las medidas especiales adoptadas se encuentra también el aplazamiento del pago del impuesto de vehículos y otras reducciones tributarias, mientras dure la declaración del Estado de Alarma..
“Nos encontramos en una situación extraordinaria y vamos a movilizar el mayor presupuesto en políticas sociales de la historia de Cartagena para ayudar a los colectivos más desfavorecidos y el mayor de la década en inversiones para incentivar la recuperación de la economía. Además, queremos que sea un documento de consenso porque en esta situación los cartageneros nos piden que nos pongamos de acuerdo y actuemos unidos para buscar soluciones. Por eso entregamos el borrador del presupuesto, para que nos puedan hacer aportaciones”, ha explicado Ana Belén Castejón.
Gracias al Real Decreto-Ley 8/2020, el superávit del Ayuntamiento se puede destinar a política social, por lo que las partidas destinas a este fin, entre el superávit y el presupuesto, alcanzan los 17 millones de euros, lo que supone un crecimiento cercano a los tres millones de euros con respecto a 2019.
“El borrador de presupuesto que habíamos elaborado destinaba a Servicios Sociales 14,3 millones, lo que suponía un incremento de 1,2 millones con respecto a 2019. Con las nuevas modificaciones y el uso del superávit, Servicios Sociales contará con 17 millones de euros”, ha explicado Castejón.
Al trasladar parte del presupuesto de Servicios Sociales al Superávit, los colectivos podrán disponer de sus partidas de forma más ágil ya que no estarán sometidas a la concurrencia competitiva y se entregarán en cuanto se tramite el superávit, que se hará de forma simultánea al presupuesto.
Además, el Ayuntamiento contará con 500.000 euros para ayudas al alquiler a personas afectadas por la crisis; 400.000 euros para incrementar la partida de Asistencia Social; y 420.000 euros para alojamientos para colectivos vulnerables, entre otras partidas destinadas a ayudar a quienes menos tienen.
Asimismo, se dotará al Presupuesto de un fondo de contingencia que sextuplica el del año 2019 y que puede ser ampliado para ayudar a comerciantes, hosteleros y autónomos.
LAS MAYORES INVERSIONES DE LA DÉCADA
Además, el presupuesto propone las mayores inversiones de la década, con 16 millones de euros para obra pública con el objetivo de que, cuando la crisis sanitaria pase, el Ayuntamiento se convierta en el revulsivo económico que las empresas y autónomos necesitan para revitalizar el tejido productivo que tanto está sufriendo en estos momentos.
Las inversiones se centralizarán en el Mar Menor, ya que allí a la crisis sanitaria se une la medioambiental; y en el centro histórico; con el objetivo de recuperar el sector turístico y hostelero; asimismo se invertirá en obras hidráulicas para evitar inundaciones.
Por su parte, la concejala de Hacienda, Esperanza Nieto, ha anunciado incentivos y ayudas fiscales para autónomos, pymes y familias, entre las que se incluye la ampliación del plazo del pago del impuesto de vehículos hasta 15 días después de que finalice el estado de alarma, como ha establecido un bando firmado hoy por la alcaldesa..
En este sentido, Nieto ha explicado que se han declarado inhábiles los días comprendidos en el estado de alarma para el cálculo de la cuota de las tasas a abonar por mesas y sillas; mercadillos; kioscos (de apertura no autorizada); escuelas infantiles; y barracas, que serán prorrateados del importe anual y deducidos de la cuota.
La alcaldesa ha finalizado agradeciendo el apoyo de los grupos de la oposición; al personal sanitario; trabajadores de supermercados; transportistas; agricultores; artistas; trabajadores que se han quedado en paro; autónomos y pequeños empresarios; empleados de contratas; policías; bomberos; miembros de Protección Civil; trabajadores municipales; y personal militar, así como a los mayores y a todos los ciudadanos en general que con su actitud y responsabilidad están contribuyendo a ralentizar la propagación del virus.