Este miércoles 6 de noviembre, a partir de las 18:00 horas en el Local Social de Los Mateos, Cartagena Piensa propone en el barrio de Santa Lucía conocer cómo se entiende el Día de Difuntos de la tradición cristiana a través de otras culturas. Para ello María del Carmen Solano-Báez, Doctora en Sociedad, Desarrollo y Relaciones Laborales por la Universidad de Murcia, llevará a cabo el taller `Recordando a nuestros difuntos con otras miradas´.
Alrededor de la elaboración de un altar de muertos, parte fundamental de los tradiciones mexicanas del Día de Muertos (Día de Todos los Santos), nos introduciremos en las formas de recordar a los difuntos de otras culturas. Será una oportunidad de entender las distintas visiones, de distintas generaciones y distintas culturas que conviven en los barrios. Simultáneamente se realizarán actividades relacionadas para los niños a cargo de la Asociación Concientizarte.
Sobre Los altares de los muertos
Según la tradición, el alma de las personas que han muerto vuelve a visitar a su familia el Día de Muertos. Por eso, los mexicanos esperan su visita con todo lo que le gustaba al difunto. Construyen un altar lleno de flores y en él le dejan cigarrillos, chocolate, dulces, tamales, caldos y también tequila. Al final de este día, estos alimentos no tienen sabor porque el alma del muerto ha venido y se ha llevado su esencia. Los niños y los mayores hacen preciosos altares. El lugar donde se coloca el altar se tiene que barrer con hierbas aromáticas un día antes y los familiares esperan despiertos durante toda la noche al espíritu de su muerto, que bajará para disfrutar de su
ofrenda.
Una de las cosas más interesantes de esta celebración es la unión de la religión católica y las culturas prehispánicas. Hace 3.000 años, mucho antes de la llegada de los españoles, algunas etnias indígenas celebraban rituales en honor a la vida de sus antepasados en el Día de Todas las Almas. En el siglo XVI, se unieron las dos celebraciones y empezaron a celebrar el Día de Muertos.
En 2003, la UNESCO dijo que el Día de Muertos era “una de las expresiones culturales más antiguas y de mayor fuerza entre los grupos indígenas del país”, y por eso declaró la celebración como Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.
Sobre la ponente
María del Carmen Solano-Báez es originaria de Puebla, México. Doctora en Sociedad, Desarrollo y Relaciones Laborales por la Universidad de Murcia e Investigadora del Centro de Estudios para el Desarrollo Rural en Zautla, Puebla, México.