Esta mañana, el concejal en funciones de MC Cartagena, José López, junto a los ediles electos, Jesús Giménez y Enrique Pérez, han girado visita a diversos emplazamientos del municipio para comprobar, de primera mano, que la grosera incapacidad socialista a lo largo de los dos años de Alcaldía de Ana Belén Castejón requerirá de un notable esfuerzo del nuevo equipo de Gobierno para remediar la ingente cantidad de obras y proyectos inacabados y, lo que es más grave, carentes de financiación para su finalización.

Obras inacabadas, herencia del PSOE

En primer lugar, los representantes de MC se han desplazado hasta El Albujón donde el Ejecutivo socialista ha dejado inconclusa la ampliación de la actuación que tenía por objeto la reordenación del tráfico rodado y accesos peatonales en Avenida de la Constitución Española.

Sin embargo, una vez realizada la actuación, se detectó la necesidad de acometer, además, la canalización y mejora de pluviales, para lo que fue necesaria una modificación del presupuesto de 2018 para continuar obras contratadas en 2017. A día de hoy, la actuación sigue sin estar finalizada.

López, Giménez y Pérez han continuado su visita comprobando que la ineficacia de Castejón se ha extendido por todo el municipio. En idéntica situación ha quedado la eliminación de placas de fibrocemento del techo del local social de San José Obrero.

Del mismo modo, en la carretera de Canteras han quedado inacabadas las mejoras en materia de accesibilidad para peatones; mientras que en el Casco Histórico, en Sor Francisca Armendáriz, MC deberá ejecutar el espacio público allí proyectado o la remodelación integral del Parque Sauces.

Por su parte, en José María La Puerta, el huerto urbano planeado deberá esperar a la entrada del Gobierno cartagenerista, igual que el arreglo de la cubierta del Centro Cívico en El Algar y el acondicionamiento de la principal plaza pública de Perín.

Compromiso cartagenerista

Esta coyuntura obligará a MC, una vez asuma sus responsabilidades al frente del Ayuntamiento de Cartagena, a llevar a cabo la regularización de las cuentas ante la nefasta gestión del PSOE y subsanar la herencia que deja Castejón en materia de obras, a la que hay que sumar el notable incremento en el retraso del pago a proveedores, que la socialista ha elevado hasta los cinco meses.