- Ciudadanos reclama la refundación de la Mesa del Pacto por la Noche, actualizar la ordenanza y programas con alternativas que sean continuos y reajustados según sus logros y fracasos
Tras conocerse que el Ayuntamiento de Cartagena no tiene un plan especial para evitar el consumo de alcohol por parte de los menores durante las fiestas, y que todo se reducirá, en palabras del concejal de Seguridad, Francisco Aznar, "a darse una vuelta si acaso", la concejal de Ciudadanos, Ana Rama, ha señalado que "el señor Aznar no tiene un plan especial para estas fiestas, y tampoco uno ordinario para el resto del año, no tiene ningún plan para este fenómeno y (como el mismo ha admitido frente a los sindicatos), está "en funciones", a la espera de que lo coloquen en un puesto de la Delegación del Gobierno y poder marcharse sin mirar atrás, sin resolver sus asuntos pendientes; ya ni siquiera cuida sus declaraciones inconsistentes ante los medios de comunicación, ni respeta el trabajo de nuestras fuerzas policiales que no se dan vueltas", lamenta indignada Rama.
La edil naranja ha recordado que en abril de 2016 se constituyó la Mesa del Pacto por la Noche con la esperanza de poder encontrar soluciones a un problema de calado social como es el consumo de alcohol en la vía pública y por menores". "Tras varias sesiones, la última en marzo de 2017, esta Mesa resultó ser manifiestamente ineficaz para erradicar este problema", ha lamentado la edil naranja que ha recordado que hace sólo unos días la Policía Local denunció a 12 menores por consumo de alcohol en vía pública en el Polígono Residencial de Santa Ana. "Una sociedad importante como la cartagenera tiene que ser capaz de reconducir el ocio juvenil hacia modelos más saludables que lo alejen del alcohol y el botelleo, al menos intentarlo con todas sus fuerzas; algo está fallando y pide a gritos una intervención municipal decidida".
Con respecto al Pacto por la Noche, la concejal de la formación naranja piensa que debe volver a reunirse, pero con el compromiso "refundarse para ser de verdad eficaz y productivo, por ejemplo organizando propuestas concretas para las épocas de fiestas, de manera que sean tratadas y coordinadas con la Junta Local de Seguridad" con nuevos estatutos y objetivos a corto y medio plazo.
El único logro de esa mesa fue -recuerda Rama- el programa INTEMSA (Iniciativas de Tiempo Saludable) que fue un completo fiasco, "sin continuidad, sin seguimiento, ese programa no puede dar frutos, requiere vigilarlo, reajustar sus parámetros para empujar con más decisión a nuestra juventud hacia alternativas de ocio saludables y positivas". En opinión de Ana Rama, tenemos ante nosotros un problema complejo que requiere una intervención o un plan de choque a varios niveles, "cuando en los llamados botelleos seguimos encontrando a menores está fallando también el control familiar, y desde el Ayuntamiento podemos hacer muchas cosas para asesorar a hijos y padres". "Debemos fijarnos en aquellos municipios que sí han conseguido disminuir considerablemente este fenómeno, con actuaciones policiales, alternativas, y campañas, y aprender de su experiencia", ha añadido Rama que asegura que "hay decenas de planes que han funcionado en otras poblaciones, si el PSOE no quiere hacer uno propio, sólo tiene que cogerlos, adaptarlos y enriquecerlos; y si los cita, mejor, no como el Plan de Comercio que plagió de Palencia".
En cuanto a la normativa municipal, "consideramos que en nuestra ordenanza municipal hay todavía mucho margen para actualizarla, endurecerla, y revisarla, una normativa que ya tiene más de 14 años y requiere una adaptación a los oscuros tiempos que corren; también creo que con la necesaria ampliación de la plantilla de nuestra Policía Local podemos intensificar el control con brigadas especializadas", ha propuesto la concejal de Cs que considera que el Ayuntamiento "no puede conformarse con ejecutar programas de ocio puntuales y cuyos resultados no se evalúan para reconducirlo si es necesario, o darse una vuelta y permitir los botelleos mientras no molesten porque al final tendremos que lamentar una desgracia".