- La formación naranja considera "imprecisa" la información ofrecida por el Gobierno de Cartagena en cuanto a las reparaciones de las que tendrá que hacerse cargo la Unión Temporal de Empresas y los planes de inversión que correrán a cargo del Ayuntamiento para abrir definitivamente este centro deportivo
- Manuel Padín ha recordado que el anterior responsable de Deportes, Ricardo Segado, le informó en noviembre de 2017 que tenía preparado un proyecto valorado en 600.000 euros para hacer frente a las principales deficiencias
Hace unos días, el Ayuntamiento de Cartagena anunció que la alcaldesa de Cartagena había llegado a un acuerdo con la Unión Temporal de Empresas de Dragados y Emurtel, encargada de la construcción del Palacio de Deportes, para subsanar las deficiencias que presenta esta infraestructura, especialmente en la pista central.
Según el portavoz de Ciudadanos en Cartagena, Manuel Padín, "la información ofrecida por el Gobierno no puede ser más imprecisa, salvo por ciertos arreglos en la pista central que correrá a cargo de la UTE, poco más sabemos sobre los planes de inversión concretos que tiene el Ayuntamiento para que el Palacio de Deportes esté en perfectas condiciones". El portavoz de Cs ha recordado que antes de la última reunión con la UTE, Castejón aseguró que iba a reclamar 250.000 euros por problemas de construcción, pero al parecer el acuerdo se ha cerrado en sólo unos 100.000 euros".
Por otra parte y según el Ayuntamiento, la Concejalía de Servicios Públicos tiene valorado un proyecto en 45.000 euros para instalar arcos de seguridad en las escaleras de la pista central, y que hay un proyecto en la Dirección General de Deportes que estima las necesidades de climatización en 190.000 euros. "No sabemos si estos dos proyectos tienen la debida dotación presupuestaria para hacerse, ni plazos de ejecución ni nada", ha lamentado Manuel Padín.
El Grupo Municipal de Ciudadanos ha denunciado que la información ofrecida por el Ayuntamiento es incierta y contrasta con el anuncio que el anterior responsable de Deportes, el edil de MC, Ricardo Segado, realizó en noviembre de 2017, "nos dijo que su departamento tenía preparado un proyecto, valorado en unos 600.000 euros, que sería incluido en los presupuestos municipales de 2018 para solventar muchas de las deficiencias con 300.000 euros, y aportar los equipamientos necesarios, con otros 300.000 euros; pero en el borrador de las cuentas del PSOE no hay nada de eso".
"Son tantas las dudas que tenemos con ese 'acuerdo' alcanzado entre el Ayuntamiento y la UTE, que no tenemos más remedio que registrar varias preguntas para forzar al Gobierno a ser más concreto y a especificar cuáles son sus planes para corregir estos problemas y abrir la instalación definitivamente", ha informado el portavoz de la formación naranja.
Algunas deficiencias no resueltas
Una comitiva de Ciudadanos visitó el Palacio de Deportes y, entre otras cosas, detectó que la cubierta exterior del Palacio no tiene ningún sistema para recoger el agua pluvial y ésta se acumula en los alrededores formando grandes charcos por lo que es necesario incorporar un sistema de captación para desalojar y canalizar el agua a través de la instalación de canaletas, o similar.
Otra de las deficiencias que se mantienen a día de hoy es la ausencia de aislamiento de la piscina, de manera que el vapor de cloro, altamente corrosivo, se expande con facilidad por todo el recinto y amenaza con dañar y oxidar toda la cubierta interior en un plazo de cuatro o cinco meses.
La falta de un sistema de aprovechamiento energético fue otra de las carencias detectadas por Ciudadanos. "Clama al cielo que no se haya tenido en cuenta la sostenibilidad del edificio, no existe una sola placa solar en estos 21.000 metros cuadrados, lo que va a suponer un elevadísimo coste de mantenimiento; aunque creemos que es algo que puede corregirse".
A los conocidos problemas con la planimetría de la solera de la pista central, con el parqué que no es apto para la práctica del deporte, o los clavos descubiertos que requieren una panelación, se le suma la ausencia de barandillas en algunas zonas del pabellón central lo que supone un claro riesgo de caída para los visitantes, y diversos obstáculos arquitectónicos.
Por otra parte, el mobiliario adquirido como las taquillas y los bancos para los vestuarios es inadecuado y no satisfará la futura demanda de los usuarios.