Organizado por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Cartagena, a través de Cartagena Piensa y Leer, Pensar e Imaginar, el jueves día 1 de junio tendrá lugar en la Biblioteca Josefina Soria del Centro Cultural Ramón Alonso Luzzy la conferencia titulada “El ideal político e ilustrado de la fraternidad hoy día", a cargo del
filósofo y profesor Ángel Puyol González.
El acto, con entrada libre hasta completar aforo, comenzará a las 20 horas y será presentado por Emilio Ginés Martínez Navarro, catedrático de Filosofía Moral de la Universidad de Murcia.
Angel Puyol González es profesor de Ética y Filosofía política en la Universitat Autònoma de Barcelona. Ha sido Visiting Scholar en la London School of Economics and Political Science, la New York University y La Sapienza (Roma). Es autor, entre otros libros, de Justícia i salut. Ètica per al racionament del recursos sanitaris (UAB, 1998, Premio de Investigación de la Fundación Víctor Grífols), El discurso de la igualdad (Crítica, 2001), El sueño de la igualdad de oportunidades (Gedisa, 2010), Rawls. El filósofo de la justicia (El País, 2015; traducido a tres idiomas); y ha coeditado las obras colectivas Bioética, justicia y globalización (Erein, 2007) y Filosofía de la epidemiología social (CSIC, 2016).
Emilio Martínez Navarro (Cartagena, España, 1958), es Catedrático de Filosofía Moral y Política en la Universidad de Murcia, donde imparte actualmente las materias Historia de las Ideas Políticas y Sociales, Historia del Pensamiento Político Contemporáneo, Bioética y Profesionalidad, Ética del Desarrollo y Problemas y Debates en torno a la Democracia.
Puyol ha publicado recientemente el libro "EL DERECHO A LA FRATERNIDAD" (Catarata, Madrid 2017). En él plantea que afirmar que la fraternidad ha sido históricamente la gran olvidada de la tríada revolucionaria francesa no pasa de ser una constatación obvia. Pero sostener, a partir de esto, que el lugar que antaño ocupaba aquella noble categoría lo ocupa ahora la solidaridad constituye una severa confusión conceptual (se trata de conceptos con determinaciones diferentes).
De la misma manera que nada más alejado del espíritu de la fraternidad que contentarse con la generalización de determinados afectos, como hace un cierto fraternalismo light (más próximo al insustancial todo el mundo es bueno que al valor republicano en sentido propio). En realidad, la lista de malentendidos alrededor de la fraternidad podría ampliarse mucho más. Pero precisamente porque la lista se haría larga, vale la pena, en vez de intentar reconstruirla y criticarla, el autor invita al lector a adentrarse en las páginas de este libro.
En él encontrará un punto de vista tan original como estimulante, el de la reivindicación de la fraternidad como un derecho. No se trata, claro está, de promover la imposición de un determinado tipo de afectos, sino de reconocer que nadie, absolutamente nadie (puesto que no hay hermanos de primera y hermanos de segunda), debe quedar excluido de los beneficios y las cargas de la vida en sociedad.