El primer balance de los responsables de Mucho Más Mayo en su octava edición es muy satisfactorio. Las cifras son elocuentes: 400 artistas, 105 actividades, más de 15.000 espectadores. Mejoran todas las de la anterior edición, en que el festival fue recuperado por el Ayuntamiento tras cuatro años desparecido.

Pero no se trata sólo de cifras, los contenidos de las propuestas también han mejorado en calidad e interés. Alrededor de un eje temático ("Comunidades imaginadas") se han desarrollado una serie de proyectos, ideas, diseños y actividades diversas que han supuesto un enriquecedor debate y un prisma poliédrico de abordaje del rico campo de significados que se pueden desplegar bajo ese sintagma.

Desde las películas del ciclo "Memorias desplazadas" a las conferencias del ciclo "La rosa de nadie: subjetividades en juego y comunitarismos destituyentes", pasando por instalaciones o talleres formativos, una verdadera investigación creativa ha explorado diferentes dimensiones de estas "comunidades imaginadas".

Este ha sido también el año de la recuperación y de la innovación. La primera ha venido de la mano de la sección "Arte al centro: el festival de los estudiantes", que ha restablecido el vínculo de Mucho Más Mayo con los centros educativos del municipio. Hasta diez centro educativos de secundaria y bachiller, incluida la UPCT (especialmente la Escuela Técnica Superior de Arquitectura y Edificación) han tomado parte activa en el festival de este año, desarrollando proyectos propios en los mismos centros o en sus entornos urbanos, o en el centro de la ciudad. Asimismo muchos artistas han visitado estos centros para contar y exponer sus proyectos de trabajo.

La innovación ha estado representada por la nueva actividad de "Mayo Abierto", apertura de estudios y espacios creativos de artistas locales, que ha permitido visitas a 16 espacios y talleres de artista.

Particular mención merece por su intensidad la presencia del festival en el barrio invitado este año, que ha sido Barrio de Peral- Jose María Lapuerta. Hasta 36 actividades se han desarrollado en estos barrios, la mayor programación que han conocido, en los que ha habido una alta movilización asociativa y ciudadana en torno a M+M, caraterizandose por la gran participación popular en la diferentes propuestas.

También las artes escénicas ha mejorado su presencia, contando con hasta 13 espectáculos de teatro, danza y circo, destacando la recuperación de la actividad de circo a través de la Escuela de Circo Malabagic, con sus notables invitados nacionales e internacionales ("Circus is coming"), o -por su originalidad- la sorprendente experiencia de teatro sensorial experimental en los autobuses urbanos.

Como es ya nota característica de M+M, la edición de 2017 ha dejado imponentes obras de gran formato de murales y graffitis de artistas nacionales e internacionales, que se añaden al numeroso patrimonio artístico mural del que ya cuenta la ciudad y que procede en gran medida de la historia del festival. Esta vez los nuevos trabajos -nueve en total- se pueden ver en el IES Los Molinos, en el Conservatorio Profesional de Música de Cartagena, en el Pabellón de Deportes de Wssel de Guimbarda y en la Milla Verde de Barrio de Peral.

La música en todas sus modalidades -con otro éxito de Mucha Más Música en las praderas de cesped de la Muralla del Mar-, los cortometrajes de la Semana Corta, las performance y diversas acciones artísticas híbridas de lenguajes creativos diversos, han completado el festival de este año, que ha contado con artistas de gran proyección en el arte y la cultura españolas como son los artistas visuales Rogelio López Cuenca, Elo Vega, la creadora transmedia Belén Santa-Olalla, los cineastas María Cañas, Luis López Carrasco, Alejandro Alvarado y Concha Barquero, los artistas DosJotas, MawatreS, los graffiteros Vesod, Refreshink, Mario Mankey o Kraser, o artistas asentados en Cartagena y de trayectorias muy reconocidas como Jesús Nieto, Domingo Llor, Belén Orta, Salvi Vivancos, etc.

Como todo gran festival de arte contemporáneo -y eso es ya Mucho Más Mayo- no ha estado ausente la polémica alrededor de algunas propuestas, que a veces resulta inevitable por la diversa recepción de algunas obras en su interacción con el espacio público.