La concejal de la formación naranja, Ana Rama, considera que "la cantidad de tiempo que se ha perdido es bochornosa" y recrimina al Gobierno que haya intentado hacer "recaer la responsabilidad de la decisión sobre las juventudes de las formaciones políticas; nosotros lo dijimos desde el principio, no podíamos legalmente habilitar y municipalizar alegremente un espacio para beber alcohol, y muchos menos sin las garantías que requerían como la de proporcionar la seguridad necesaria, o los servicios sanitarios"
La concejal de Ciudadanos en Cartagena, Ana Rama, ha señalado que "el Gobierno municipal ha decidido dar marcha atrás; se les ha dicho a los jóvenes cartageneros que se iba a habilitar un espacio, un ociódromo o botellódromo, se les ha dicho durante meses que van a acondicionar el campamento festero de Carthagineses y Romanos, y ahora, tras anunciarlo a bombo y platillo, nada de nada, ni espacio habilitado, ni alternativas de ocio; esto es una tomadura de pelo".
Para la concejal de la formación naranja, "primero se quiso hacer recaer una responsabilidad del Gobierno municipal sobre las juventudes del los partidos políticos, para que fueran ellos quien tomaran una decisión, ése fue el primer error". El Grupo Municipal de Ciudadanos quiere recordar que fue diciembre de 2016 cuando el concejal de Festejos anunció una idea presentada por los 'colectivos juveniles' y que le parecía "acertada": instalar un botellódromo en el recinto festero de Carthagineses y Romanos y que para conseguirlo modificaría la normativa. Incluso se llegaron a hacer los primeros trabajos para habilitar el recinto a través de las brigadas municipales. En febrero de 2017, el concejal de Seguridad, Francisco Aznar, aseguró que iban a contratar a una empresa privada para asegurar la vigilancia y la seguridad, y todavía entonces afirmaban que "el Gobierno local haría todo lo posible para tener el recinto listo en Semana Santa".
La concejal Ana Rama considera que "la cantidad de tiempo que se ha perdido es bochornosa, el Gobierno se ha empeñado atravesar este camino a ninguna parte a pesar de la oposición de muchos colectivos, entre ellos, la Asociación de Hosteleros de Cartagena y Comarca (Hostecar); nosotros lo dijimos desde el principio, no podíamos legalmente habilitar y municipalizar alegremente un espacio para beber alcohol, y muchos menos sin las garantías que requerían como proporcionar la seguridad necesaria, servicios públicos, o servicios sanitarios".
"Al menos, aunque tarde, han reconocido su error, espero que ahora centren sus esfuerzos en diseñar planes de alternativas de ocio saludables para combatir este fenómeno tan perjudicial para una ciudad; es lo que tendrían que haber hecho desde el principio", ha afirmado Ana Rama.