El equipo de competición en desafíos internacionales de ingeniería automovilística UPCT Racing Team participa a partir de este martes en la nueva edición de Formula Student Spain. Medirán el rendimiento de su nuevo monoplaza frente al de 70 escuadras de otras tantas universidades de todo el mundo.

La treintena de estudiantes de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) que forman parte de este equipo han desarrollado durante los dos últimos años un vehículo de competición con motor, por primera vez, eléctrico. “Durante una primera etapa realizamos el diseño de la totalidad de sistemas y elementos del automóvil, para en la siguiente llevar a cabo la fabricación, ensayo y puesta a punto del prototipo”, explica el capitán del equipo, Daniel Gomariz. Calculan haberle dedicado al nuevo vehículo más de 21.000 horas de esfuerzo.

El objetivo de cada una de las sucesivas ediciones de este proyecto consiste en crear desde cero un automóvil monoplaza para la prestigiosa competición internacional Formula SAE / Formula Student, que es la competición de mayor envergadura, complejidad y grado de exigencia que existe en todo el mundo para alumnos de ingeniería. En la anterior edición de Formula Student Spain en la que participó el UPCT Racing Team, los alumnos de la Politécnica de Cartagena quedaron en cuarto puesto.

“Los excelentes resultados que se consiguen en cada edición de esta prestigiosa competición internacional, sitúan a la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) como un claro referente a nivel mundial en el ámbito de los estudios de ingeniería, entre las mejores universidades de Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Italia o Japón”, señala Patricio Franco, el investigador que coordina al equipo.

“A través de esta exigente competición internacional, los estudiantes consiguen una extraordinaria experiencia para su formación como futuros ingenieros y aprenden a trabajar en equipo al tiempo que entran en contacto con diversas empresas y el mundo laboral”, resalta el docente. Prueba de ello son los numerosos antiguos miembros del equipo que están trabajando en la industria automovilística.

“Los alumnos trabajan en esta apasionante iniciativa, destinada a la mejora de su formación profesional, con la ayuda de numerosos profesores, técnicos de laboratorio y personal de toda la Universidad, con el apoyo del Equipo Rectoral y de la dirección de la Escuela de Industriales, así como de numerosas entidades patrocinadoras y colaboradoras sin las cuales este proyecto no sería posible”, recuerda Franco.

En la imagen, los estudiantes durante el proceso de fabricación del monoplaza.